El Rolde de Estudios Aragoneses ha criticado que la Ley de protección y promoción de las lenguas propias de Aragón, aprobada en diciembre de 2009 en las Cortes de Aragón, está en "punto muerto y marcha atrás".

Desde este colectivo han rememorado que en esa fecha se produjo un acontecimiento "largamente esperado" con la aprobación de la citada ley después de varias tentativas fallidas en la década anterior.

La ley, "que al final reconocía la pluralidad lingüística de Aragón, declaraba que el aragonés y el catalán son lenguas propias de esta tierra y garantizaba su conservación, recuperación, uso, promoción, enseñanza y difusión", han señalado.

Además, esa ley recordaba que cada lengua posee unas características que la hacen única y, por lo tanto, de gran valor en el plano patrimonial", han apostillado.

El desarrollo de esta Ley de lenguas, "aun siendo un marco legal bastante limitado, permanece, desde el año pasado, en punto muerto" han detectado para lamentar las recientes declaraciones de la consejera de Educación, Universidad, Cultura y Deporte, Dolores Serrat, anunciando las líneas generales de una nueva Ley de Lenguas, que derogaría la anterior.

Para este colectivo, las declaraciones de Serrat "señalan unos decididos movimientos que no serán, precisamente, hacia adelante , sino de "marcha atrás".

Desde el Rolde de Estudios Aragoneses han expresado su "preocupación por las modificaciones que pueda sufrir la normativa anterior y los recortes que puedan suponer en los derechos de los portadores activos de estas dos lenguas minoritarias nuestras".

Tras confiar y desear que "no se cometan torpezas y que sin ambages ni subterfugios se llamen a las cosas por su nombre" han incidido en que "el aragonés y el catalán se reconozcan en la legislación".

También demandan que se adopten medidas que "garanticen la conservación de estas lenguas en las zonas de su utilización; que se promueva su presencia en los medios de comunicación y que formen parte activa del sistema educativo".