Las compañías navieras muestran cierto pesimismo ante la Operación Paso del Estrecho, que arrancó el pasado viernes, al prever una menor afluencia de pasajeros, como viene ocurriendo en los últimos años y debido, fundamentalmente, a la crisis económica y a un cambio de tendencia a la hora de elegir el medio de transporte en beneficio del avión.

Según un comunicado, pese a que la previsión oficial es de 2,5 millones de pasajeros, las cifras que manejan las navieras apuntan a un trafico menor ya que desde 2007 se acumula un descenso de casi un 30 por ciento y el año pasado se situó en 2,11 millones de pasajeros.

En cuanto a la cifra de buques, se mantienen los mismos medios que en 2007, con 39 barcos de doce navieras diferentes, entre las que se encuentran Balearia, Acciona, Armas y FRS. La mayoría de estas han acometido ante la operación de este año refuerzos y renovaciones en sus flotas.

La operación, que se extenderá hasta el 15 de septiembre, prevé, según estimaciones oficiales, una mayor afluencia los días 22, 23, 24, 29 y 30 de junio y el 1, 6, 7 y 8 de julio, al tiempo que verá modificado el ritmo habitual de los movimientos de pasajeros durante el mes de ayuno de Ramadán, que este año se celebrará entre el 20 de julio y el 18 de agosto.