Jesús E.C., el acusado de apuñalar mortalmente con un cuchillo jamonero a Juan Fernando Martínez Sánchez durante la Feria de Abril de 2009, ha negado este lunes haber cometido el crimen, pues "no le he pegado ninguna puñalada a nadie", y ha aludido a un "pacto" de los otros dos imputados en esta causa para inculparle y atribuirle la muerte de la víctima, ocurrida en la madrugada del día 1 de mayo y por la que la Fiscalía le pide 20 años de cárcel.

La Sección Séptima de la Audiencia Provincial ha acogido este lunes la primera jornada del juicio contra Jesús E.C., Martín S.B., imputado por un delito de robo con violencia intentado en relación a la sustracción de la chaqueta que desencadenó la pelea posterior en la que se produjo el crimen, y Juan Antonio L.V., imputado por sendos delitos de riña tumultuaria y atentado a la autoridad, quienes han asegurado que estaban borrachos y que no vieron a nadie con un cuchillo en la "trifulca" ni tampoco el momento del crimen.

Durante su declaración, Jesús E.C. ha relatado que el día de los hechos llegó a la Feria y comenzó a beber alcohol hasta que, "a las cuatro o cinco copas" y estando "bastante ebrios", vio a Juan Antonio con un cuchillo "grande" metido en la cintura, por lo que se lo quitó y lo dejó "clavado en el albero, a la vista de todo el mundo, para que viera que no me lo iba a quedar", ha afirmado.

En este sentido, y tras negar que cortara al imputado en un dedo de la mano derecha al intentar arrebatarle el cuchillo, tal y como ha asegurado el propio Juan Antonio, ha asegurado que, a partir de ese momento, no volvió a ver el cuchillo ni tampoco a éste acusado, y que cuando volvió a la zona donde había clavado el cuchillo, lo que se produjo antes de la pelea, éste "ya no estaba" y varias personas que se encontraban allí "me dijeron" que el imputado "lo había vuelto a coger".

"A los 40 minutos", llegó a la zona Martín "registrando una chaqueta para ver si tenía algo" e incluso "se la llegó a poner", momento en el que "alguien" del grupo de la víctima "lo reconoció", tras lo que "comenzaron a golpearle a puñetazos entre tres o cuatro" a pesar de que les devolvió la referida chaqueta, por lo que "fui en su defensa" y "recibí dos puñetazos". "Había un montón de gente tirándonos botellas, y como no podía pelear porque estaba en estado de embriaguez, me retiré de la pelea", ha dicho.

"botellas volando"

"No vi a nadie con un cuchillo en medio de la pelea, sólo botellas volando, por lo que me fui antes de que la trifulca terminara en dirección hacia el Puente de las Delicias", ha incidido el acusado, quien ha aseverado que vio a Juan Antonio "en medio de la pelea, encarado con uno".

Asimismo, ha negado —tal y como ha dicho algún testigo— que en su momento dijera que le había pegado "un refilonazo" a alguien con un cuchillo o que "le había cortado el cuello a uno"; "es totalmente incierto, no le he pegado ninguna puñalada a nadie, simplemente llamé a mis amigos para ver lo que había pasado y me contaron que había una persona tirada en el suelo y que no la podían reanimar".

Al día siguiente, el acusado repitió estas llamadas "y ya me dijeron que había habido un muerto, me asusté y me puse nervioso porque yo había estado en la pelea", aunque ha vuelto a insistir en que "no saqué el cuchillo en ningún momento de la trifulca". Tras enterarse de que la Policía lo estaba buscando, "me presenté ante la Policía con mi abogada".

El cuchillo,

Sustraído de una caseta

De su lado, Juan Antonio L.V. ha narrado que cogió el cuchillo jamonero de una caseta. "Estaba bastante borracho y no sabía lo que estaba haciendo, por lo que decidí cogerlo y guardarlo en el bolsillo, pero no tenía intención de agredir", hasta que en un momento dado Jesús "tiró del cuchillo, yo lo cogí de la hoja y me hice el corte en el dedo". Asimismo, ha negado que interviniera en la pelea ni que acudiera a defender a Martín, y ha asegurado que la última persona a la que vio con el cuchillo fue a Jesús.

"No intervine en el foco de la pelea", ha afirmado el acusado, quien ha señalado que, en un momento dado, vio a una "muchedumbre" dirigirse hacia él para "matarle", por lo que "me fui corriendo" hasta ser alcanzado por agentes de la Policía a los que confundió con personas del grupo perseguidor, por lo que "forcejeé" con ellos hasta que ya llegaron dos agentes uniformados "y es entonces cuando me dejo detener y me quedo tranquilo".

Por último, Martín S.B. ha señalado que, cuando llegó a la Feria, observó a Juan Antonio "tonteando con un cuchillo", y ha admitido que, estando "ebrio" y tras consumir drogas, cogió la chaqueta de una barandilla —"allí no había nadie, estaba a disposición de cualquiera y a la vista de todo el mundo"—. "Al rato, llegaron dos o tres chavales y me dijeron si iba a robar la chaqueta, luego llegó otro chaval y se formó la discusión", en la cual "recibí un par de empujones".

La pelea tenía "varios focos"

Tras ello, Jesús "se metió en la trifulca para defenderme" y "yo me fui", por lo que ha negado que interviniera en la pelea, asegurando que "nadie llevaba ningún cuchillo en la mano" y que Juan Antonio no intervino en dicha pelea, en la que había "varios focos". "No vi que Jesús agrediera a nadie, no vi el cuchillo y tampoco vi caer al fallecido", ha insistido a preguntas del fiscal.

Asimismo, y tras asegurar que vio a Juan Antonio con sangre en los dedos, aunque "no me acuerdo si antes o después de la pelea o de la detención", ha explicado que se alejó de la pelea hacia el Puente de las Delicias, donde se encontró a Juan Antonio "y le conté que había tenido una pelea pero que no había hecho nada", por lo que "volvimos al foco de la trifulca" y ya fueron detenidos por la Policía.

Los tres acusados están actualmente en libertad tras haber abonado una fianza de 6.000 euros. El juicio continuará este martes con la declaración de testigos.