La Policía Nacional de Valladolid busca a un miembro del clan de los 'Píos', Pedro Francisco J.L, alias 'Inocencio', como presunto autor del acuchillamiento sufrido el pasado lunes por un vecino de Alicante ocurrido en el barrio vallisoletano de Las Viudas, hechos por los que además ha sido detenida otra persona e imputadas cuatro más, todas ellas pertenecientes a la referida familia, según informaron a Europa Press fuentes del caso.

Los hechos se produjeron en la calle Duero o Gualdalquivir del referido barrio, donde, presuntamente, el herido, Francisco R.S. ('Frasco'), inició una discusión con 'Inocencio' y el yerno de éste, Francisco Amador L, al no ponerse de acuerdo en el precio fijado por los 'Píos' por el traslado de la víctima y su esposa en coche hasta Alicante.

A resultas de la refriega, a la que se sumaron más miembros del clan familiar, Francisco R.S, recibió una cuchillada a la altura del cuello que a punto estuvo de alcanzarle la yugular, lesión de la que tuvo que ser asistido en un centro hospitalario de la capital.

Tras la pelea, la Policía Nacional detuvo a Francisco Amador L, quien ante el Juzgado de Instrucción número 2, antes de quedar en libertad, aseguró que fue el lesionado el que de improviso sacó un cuchillo, sin que supiera concretar cómo este último llegó a lesionarse en el cuello.

Su suegro, Pedro Francisco J.L. ('Inocencio'), quien se da la circunstancia de que conocía a la víctima por haber coincidido ambos en el Centro Penitenciario de Valladolid, permanece desde entonces en paradero desconocido y es buscado como presunto responsable del acuchillamiento.

Además, otras cuatro personas de este clan familiar han sido imputadas por los hechos.

Dos hermanos y casi 50

Años de cárcel

El clan de los 'Píos' es conocido por el grave episodio protagonizado por dos de sus miembros, los hermanos Rafael ('Moro') y Álvaro J.L, condenados a penas que suman casi 50 años como autores del triple crimen de la calle Tajo de Valladolid ocurrido en día 2 de diciembre de 2005, donde una pelea registrada con los hermanos Teodoro y Rubén S.E, que acudieron a su casa en busca de droga, se saldó con la muerte a tiros y puñaladas de estos últimos y de la propia esposa del segundo de los dos condenados, que recibió un disparo fortuito en la cabeza.

Su condena, dictada por la Audiencia de Valladolid, fue ratificada por el Tribunal Supremo, que desestimó así el recurso de casación que había interpuesto Rafael J.L.—su hermano mayor no recurrió la sentencia—contra la pena de 49,6 años por dos delitos de asesinato (19 años por cada uno de ellos), un delito de homicidio doloso (10 años) y otro año y medio por delito de tenencia ilícita de armas.

El condenado y su hermano mayor, Álvaro, sobre el que recayó en su día una condena de 38 años de prisión por dos delitos de asesinato que no recurrió, habrán de abonar, de forma conjunta y solidaria, indemnizaciones por importe global de 560.000 euros, de ellos 170.806 para la madre de los hermanos asesinados, así como 7.763 euros a cada uno de los otros tres hermanos de las víctimas.

Paradójicamente, Rafael tendrá también que indemnizar a su propio hermano Álvaro en 93.166 euros por haber dado muerte a su esposa durante el tiroteo y con 38.819 euros a los siete hijos de ésta.