El alcalde de Sevilla, Juan Ignacio Zoido, ha asegurado que realizará los "esfuerzos" necesarios para llegar a un acuerdo sobre la aplicación de las 37,5 horas con la plantilla municipal, aunque advierte de que "la ley es igual para todos", y ha criticado que este lunes se haya llevado a cabo una acción de protesta por parte de este colectivo ante la Casa Consistorial, teniendo en cuenta que las negociaciones aún están "abiertas".

Tras la conferencia del alcalde de Almería, Luis Rogelio Rodríguez-Comendador, en el desayuno Nueva Economía Forum, Zoido ha señalado que actuará con la "misma seriedad y responsabilidad" que asegura ha ejercido desde "el primer momento", apuntando a que se han alcanzado acuerdos "históricos", con rebajas de sueldo, en las empresas municipales Tussam, Lipasam o Emasesa. También, recuerda que se ha llegado a acuerdo con la Policía Local, mientras se negocia con los bomberos y "con quien hoy se acampa en el Ayuntamiento, ya que reclaman una moratoria a la hora de aplicar las 37,5 horas, que hay que hacer por ley".

"Igual que hemos conseguido grandes acuerdos con los otros colectivos municipales, haremos los mismos esfuerzos con este colectivo, pero que ha de tener en cuenta que también se nos exige responsabilidad al aplicar la norma porque no puede haber ciudadanos de primera y de segunda", sentencia Zoido, que deja claro que la ley se ha de aplicar "igual para todos", algo que se hará "desde la negociación y usando el diálogo".

Sin embargo, ha criticado que se lleve a cabo una medida de presión de este calado por parte de estos trabajadores cuando hay una negociación abierta, por lo que insta a esperar a que se termine el diálogo y "si no gustan las medidas, que vengan las medidas de presión".

En este contexto, recuerda que cuadno asumió el gobierno de la ciudad encontró una deuda de más de 750 millones, con unas empresas situación "tremenda" en empresas como Lipasam o Tussam, mientras que Mercasevilla y la Fundación DeSevilla se encontraban en causa de disolución, algo que "ya ha pasado a la historia".

Así, señala que el primer plan de ajuste lo puso la concejal de Hacienda, Asunción Fley, "asumiéndolo sin necesidad de que viniera después el Gobierno ha imponérnoslo". Zoido explica que se redujo el 25 por ciento de los cargos de libre designación, de 21 a siete las delegaciones y en Urbanismo se eliminó 17 cargos a dedo, con un ahorro de 2,5 millones.

"Desde esa situación se negoció con los trabajadores desde el primer momento y se consiguieron acuerdos, como en Tussam, donde se está reduciendo la deuda y se tienen relaciones pacificadas, recolocando a todos aquellos que durante años acampaban en el Ayuntamiento", añade Zoido, que concluye asegurando que está "acostumbrado a muchas cosas como alcalde" pero jamás se acostumbrará a "no ejercer la responsabilidad" que tiene, ya que afirma que no dejará la "misma herencia" que encontró.