La Unión de Pequeños Agricultores (UPA) de Murcia, Uniones Agrarias UPA de Galicia, y las UPAs de Aragón y Extremadura han puesto en marcha la campaña informativa '50 años de la PAC', con casi 150 actividades en el conjunto de las diez provincias, de las que una veintena se celebrarán en la Región.

Así lo ha anunciado este lunes el secretario general de UPA-Murcia y de Organización estatal de UPA, Marcos Alarcón, quien ha subrayado que los destinatarios de la campaña serán tanto escolares, como universitarios y la población en general.

Esta iniciativa, cofinanciada por la Comisión Europea, pretende "dar a conocer que la Política Agraria Común es esencial no sólo para los agricultores y ganaderos, sino para el conjunto de la sociedad y los consumidores".

Igualmente, Alarcón considera que "es esencial para garantizar un mercado de 500 millones de consumidores en la UE, el acceso a alimentos sanos y de calidad para mantener la población y la actividad en el medio rural, contribuir a la gestión territorial y mantenimiento para el medio ambiente y la lucha contra el cambio climático".

Tras dejar claro que la PAC "es la más integrada y común de las política que desarrolla la UE y que cuenta con un amplio recorrido en el que ha sufrido importantes modificaciones", ha advertido que se está en un momento "álgido" del debate sobre la definición de la PAC para el periodo 2014-2020, que a su vez "estará condicionado por la aprobación de las perspectivas financieras para ese mismo periodo".

Así, ha indicado que no es una política "cara" para los consumidores, ya que "ha pasado de representar el 70 por ciento del presupuesto de la UE en los años 70 a ser, en este periodo de 2007-2013, tan sólo el 34 por ciento del presupuesto de la UE".

Para Murcia, ha dicho, "es esencial y está necesitada de reformas, porque en este momento es una política excesivamente decantada hacia los intereses de los consumidores y no está alcanzando suficientemente los objetivos que se marca en relación con los profesionales del sector agrario ni garantiza una renta digna para los productores, además de que no está siendo equitativa en el trato con la comercialización de productos de agricultores europeos y los procedentes de países terceros".