Piden diez años de prisión para un acusado de robo con violencia en Mieres

La Fiscalía del Principado de Asturias solicita una condena que suma diez años de prisión para un acusado de un delito de robo con violencia en Mieres, donde presuntamente llegó a rociar con gasolina a la empleada de una tienda y a una clienta que se encontraba en la misma, otro delito de fabricación de sustancias inflamables y dos faltas de lesiones, ya que dos policías que lo detuvieron resultaron intoxicados después de que abriera dos bombonas de butano al percatarse de su presencia.

La Fiscalía del Principado de Asturias solicita una condena que suma diez años de prisión para un acusado de un delito de robo con violencia en Mieres, donde presuntamente llegó a rociar con gasolina a la empleada de una tienda y a una clienta que se encontraba en la misma, otro delito de fabricación de sustancias inflamables y dos faltas de lesiones, ya que dos policías que lo detuvieron resultaron intoxicados después de que abriera dos bombonas de butano al percatarse de su presencia.

Según información fiscal, la vista oral está señalada para este jueves, 7 de junio, en la Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Asturias, con sede en Oviedo, a las 10.00 horas.

El Ministerio Público sostiene que el acusado, M.Á.P.D., nacido en 1958, preparó en su domicilio, en el municipio de Mieres, con la intención de obtener un beneficio económico ilícito, un envase pulverizador de plástico con gasolina en su interior, así como varios artefactos incendiarios, fabricados también con gasolina.

Sobre las 17.30 horas del 4 de julio de 2011, el acusado entró en un establecimiento de compra-venta de oro, en Mieres, y se dirigió a la empleada, a quien, tras preguntarle por unas pulseras, le exhibió una libreta con notas manuscritas que decían "Dinamita con cócteles molotov, si hay el más mínimo problema morimos todos, ponedme a prueba, quiero el maldito dinero. Si suena la alarma, morimos todos. Quiero todo el dinero", al tiempo que rociaba a la dependienta con gasolina, ordenándole que abriera la caja registradora o "lo quemaría todo".

Al ver que la mujer no acertaba a abrir la caja, el acusado, tras rociar con gasolina a una clienta que se encontraba allí, la abrió el mismo y cogió el dinero de su interior, obligando a las dos mujeres -dependienta y clienta- a entrar en la trastienda del local.

Una vez allí, M.Á.P.D., mandó a la empleada que abriera la caja fuerte, cogiendo de ellas numerosas joyas. También se apoderó del bolso de la dependienta y le sustrajo la cartera, mientras le decía que "así" sabía dónde vivía. El valor de las joyas robadas asciende a 42.588 euros. Se recuperaron algunas de ellas, tasadas en 8.874 euros.

El 7 de julio de ese mismo año, cuando el acusado se encontraba en el domicilio de una amiga en Oviedo, llegaron agentes del Cuerpo Nacional de Policía para detenerlo. Entonces, el hombre cerró la puerta de la vivienda con el pestillo interior y abrió dos bombonas de butano. Tras lograr entrar en la casa, dos agentes resultaron intoxicados por gas. Uno de ellos permaneció dos días sin poder desarrollar sus ocupaciones habituales.

La Fiscalía considera los hechos constitutivos de un delito de robo con violencia e intimidación y de un delito de fabricación de sustancias o aparatos incendiarios o inflamables, en concurso con dos faltas de lesiones del artículo 617 del mismo texto legal.

Además de las penas de prisión, la Fiscalía solicita que se condene al acusado a indemnizar con 80 euros al agente que tuvo que apartarse dos días de sus funciones y, a la joyería asaltada, con el valor de las joyas sustraídas que no fueron recuperadas.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento