Una veintena de activistas se ha concentrado este domingo en repulsa contra la celebración de la carrera del Toro Enmaromado de Benavente (Zamora) donde un astado recorre las calles de la localidad atado con una maroma.

La concentración se ha desarrollado, por segundo año consecutivo, en la Plaza Mayor de Benavente desde las 11.30 horas y ha estado organizada por Defensa Animal de Zamora, aunque con el apoyo del Animalista PACMA y ha tenido como objetivo manifestar el rechazo a la celebración de este festejo.

Durante la hora que han estado concentrados, los manifestantes han leído un manifiesto contra esta celebración aunque todo ha transcurrido en la mayor tranquilidad, y con la presencia de agentes de la policía municipal.

"Desgraciadamente, seguimos sufriendo en España en general y en Zamora en particular y con más crudeza, la crueldad que algunas personas muestran contra los animales no humanos en este tipo de pasatiempos anacrónicos", ha apuntado el colectivo.

Defensa Animal ha afirmado que el toro enmaromado o ensogado sufre un "fuerte" componente de estrés debido al exceso hormonal, ya que los niveles de adrenalina y noradrenalina se disparan, lo que ocasiona "gran sufrimiento físico y psíquico".

Aunque los procedimientos para lograr la restricción de movimientos no causan dolor por lo general, "el miedo puede ocasionar un gran estrés psicológico al animal cuando ha sido criado bajo métodos extensivos", ha añadido.

Acoso de la gente

La organización ha asegurado que, durante el recorrido, el toro sufre el acoso de una muchedumbre que limita sus movimientos y lo agota, los choques o embistes son demostrativos del estrés y sufrimiento que está padeciendo y "exhausto, si después de hora y media de pánico no termina su recorrido, es encerrado en un cajón para su transporte al matadero".

Las razones por las que un toro ensogado no completa el trayecto, según Defensa Animal, pueden ser rotura de algunos huesos de sus patas o de las pezuñas en el asfalto, choques contra paredes, señales, vallas, etcétera, que le producen aturdimiento y a veces pérdida de capacidades motrices y agotamiento.

El colectivo ha afirmado que en Zamora aumenta cada año el número de personas que se muestra contrario a este tipo de espectáculos por razones éticas y desde Defensa Animal quieren queremos hacer pública esta creciente sensibilidad en la provincia al mostrar su oposición frontal a cualquier tipo de maltrato animal.