El tráfico en la autopista AP-9, que va desde Ferrol hasta la frontera portuguesa, se ha desplomado en el primer mes del año un 5,5 por ciento con respecto enero de 2011. Así, de los 24.711 vehículos que, de media, viajaban por esta autopista de titularidad estatal, en enero de este año este índice bajó hasta los 20.667 coches.

Según los datos del Ministerio de Fomento sobre el tráfico en autopistas de titularidad del Estado, recogidos por Europa Press, esta autopista ha perdido tráfico de forma consecutiva desde 2007, cuando circulaban de media 27.029 vehículos de media según el índice de intensidad media diaria (IMD). Ese año, además, se produjo un repunto frente al anterior, ya que en 2006 eran 25.059 los vehículos que lo hacían.

El mayor descenso de la última década en esta autopista se produjo entre 2010 y 2011, cuando cayó un 6,4 por ciento. Así, de los 26.395 vehículos que circulaban en 2010, se pasó a 24.711.

Desde 1990, salvo los descensos consecutivos de 2008, 2009, 2010 y 2011, es decir, en los años centrales de la crisis económica, sólo se había producido en una ocasión un descenso de viajes, fue en el año 1992 con respecto a 1991, cuando la AP-9 perdió un 6 por ciento del tráfico.

Cae el tráfico en santiago-LALÍN

También en la otra autopista de titularidad estatal en territorio gallego, la que va desde Santiago hasta el Alto de Santo Domingo, se ha desplomado el tráfico en enero de este año, con una caída del 9,9 por ciento, al pasar de 4.972 vehículos de media diarios a 4.479 en el primer mes de este año.

Además, la circulación por esta vía ya había experimentado un descenso en la media anual. Así, pasó de 6.159 vehículos de media en 2010 a 5.784 de media en 2011, siendo éste el único intervalo en el que se experimentó un descenso de viajes desde 2003.

En el conjunto del estado

El tráfico de las autopistas de peaje de España registraron una caída del 5,6% en 2011, cuando circularon por estas vías una medida diaria de unos 18.515 vehículos, lo que supone el mínimo de los últimos catorce años y retrotrae al sector a niveles de 1998.

La intensidad media diaria de tránsito de las autopistas de pago acumula así un desplome del 22,5% desde el inicio de la crisis, lo que indica que han perdido unos 5.400 usuarios, según datos del Ministerio de Fomento que recoge Europa Press.

Por contra, la red de vías de pago ha seguido creciendo. A cierre de 2011 las autopistas de peaje españolas sumaban un total de 2.559 kilómetros de longitud, un 7,4% más (177 kilómetros) respecto a 2006, ejercicio previo a la crisis y en el que alcanzaron su máximo histórico de usuarios, de unos 23.909 vehículos al día.

El descenso de la movilidad, tanto de particulares como de mercancías derivada de la crisis, y la elección por parte de los conductores de vías alternativas libres de peaje, figuran como principales factores del descenso de estos tráficos.

En el ejercicio 2011, todas las autopistas cerraron el año con caídas, con la excepción de la que une Alicante y Cartagena, que se anotó un leve aumento del 1,9%.

Del lado de los descensos, los más pronunciados corresponden con el grupo de autopistas que actualmente afrontan un riesgo de quiebra y para las que el Ministerio de Fomento está diseñando medidas que garanticen su reequilibrio económico financiero.

Vias en riesgo de quiebra.

La autopista radial R-4 Madrid-Ocaña es la que se anotó el mayor descenso de tráfico, de un 17,5%, el pasado año, cuando circularon por la vía una media de 6.676 vehículos diarios.

Después se situaron la R-2 Madrid-Guadalajara, con un descenso del tráfico del 16%; la R-3 Madrid-Arganda (-12%) y la R-5 Madrid-Navalcarnero (-9,4%).

Asimismo, la Madrid-Toledo, vía que recientemente solicitó el concurso de acreedores, contabilizó 1.828 usuarios diarios en 2011, un 7,4% menos que un año antes, mientras que la Ocaña-La Roda redujo su tráfico un 7%, la circunvalación de Alicante un 10%, la que conecta Madrid con el aeropuerto de Barajas un 5,5%, y la Cartagena-Vera, un 4,4%.

No obstante, otras vías con mayor número de años en explotación y que no presentan problemas de viabilidad también concluyeron el pasado ejercicio con destacados descensos de tráfico. Así, la León-Astorga cerró 2011 con una reducción del número de usuarios de un 11,4%, la AP-1 Burgos-Armiñón de un 7,6%, la Ávila-Villacastín de un 7,2% y el tramo de la A-7 entre Tarragona y Valencia, de un 6,3%.