Efectivos del Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA), pertenecientes a la Comandancia de la Guardia Civil de Albacete han procedido a la detención de A.M.G. de 65 años de edad, vecino de Albacete, como presunto autor de un delito contra la flora, la fauna y los animales domésticos, consistente en el empleo de veneno.

La actuación se produjo cuando componentes de la Patrulla del Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil de Albacete (PACPRONA), dependientes de la Sección de SEPRONA con base en la Comandancia de la Guardia Civil de Albacete, avistaron a una persona merodeando en unas madrigueras de conejos próximas a unas siembras en un conocido paraje del término municipal de Albacete.

Según pudieron observar los agentes, esta persona, tras agacharse sistemáticamente en cada una de la madrigueras depositaba algo en su interior, ha informado la Delegación del Gobierno de Castilla-La Mancha en nota de prensa.

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In fraganti'

Mientras el detenido continuaba con su actividad, la Patrulla se dirigió a la zona donde se encontraban las madrigueras, observando como depositaba unas pastillas de color azul-verdoso en el interior de una de las mismas.

Tras su detención, le fueron retiradas varias pastillas que portaba en su vestimenta, así como otras halladas en el interior de un vehículo de su propiedad próximo al lugar, resultando ser la sustancia intervenida raticida.

Después de una minuciosa inspección del lugar de los hechos, se hallaron más pastillas del citado veneno en el resto de madrigueras próximas, procediéndose a su retirada.

Según señala la Delegación del Gobierno, la finalidad perseguida con la colocación de este veneno era el exterminio de los conejos en la zona, al objeto de evitar que estos se alimentaran de las siembras del referido paraje.

Modus operandi

El 'modus operandi' que utilizaba el detenido consistía en colocar pastillas de raticida en las bocas de las madrigueras de los conejos para que éstos las consumieran, provocando la muerte de estos por envenenamiento.

La problemática del empleo de venenos con esta finalidad es doble, según señala la Delegación del Gobierno, porque, por un lado, la muerte de los conejos por envenenamiento conlleva que el veneno entre en la cadena trófica del hábitat y provoque la muerte de otros animales por el consumo de la carroña.

Asimismo, su uso lleva al exterminio del conejo en el ecosistema, cuya principal consecuencia es la desaparición de otras especies cuya base de alimentación es el conejo, significando que muchas de estas especies que se alimentan de conejos se hallan en peligro de extinción, especialmente aves rapaces.

La Patrulla del Servicio de Protección de la Naturaleza de Albacete instruyó las correspondientes diligencias, que fueron entregadas junto con el detenido en el Juzgado de Instrucción Número 3 en funciones —de guardia— de Albacete.