El presidente de la Diputación de Ourense, Manuel Baltar, ha elevado "al 14 por ciento" la bajada de trabajadores contratados desde que tomó las riendas de la institución provincial en sustitución de José Luis Baltar y ha insistido en que cumplirá su compromiso de reducir personal. En concreto, ha apuntado que la rebaja de la deuda alcanzará el 15 por ciento en 2015.

Lo ha manifestado en el coloquio posterior a la conferencia que ofreció en el 'Fórum Europa. Tribuna Galicia'. En él, a preguntas de los periodistas, se mantuvo en la tesis que ya explicitó en la reunión con el presidente gallego, Alberto Núñez Feijóo, a principios de mayo, cuando había cifrado "en el 12 por ciento" la reducción de personal en la institución desde que tomó posesión el 6 de febrero.

Tras su encuentro con Feijóo, el presidente provincial había comprometido también "una reducción drástica" de personal laboral temporal "en los próximos meses", extremo que ha ratificado este lunes. Así, ha recordado que en septiembre se hará público un Plan de Ordenación de Recursos Humanos que se visualizará en la nueva Relación de Puestos de Trabajo (RPT) que será efectiva en enero de 2013.

También ha insistido en que "existe" el objetivo de "reducir la deuda" y lo ha concretado en una caída del 15 por ciento hasta 2015. Para lograrlo, ha señalado que "varias medidas" incluidas en el 'Plan Ourense 92', con 43 actuaciones y el reto de ahorrar más de seis millones de euros, van encaminadas en ese sentido.

Entre dichas acciones de reestructuración, anunciadas el viernes, destaca la disolución de la sociedad urbanística 'Urbaourense S.A.', el próximo mes de diciembre, con la que la institución ganará 2 millones de euros en liquidez, la 'redefinición del Inorde', y la renuncia a la gestión directa del Centro Ecuestre para una posible externalización.

Por otra parte, tras restar importancia a las críticas de PSOE y BNG, hacia este plan, ha censurado que haya medios de comunicación "que antepongan el impacto mediático a la responsabilidad informativa" y se ha referido a la publicación de una noticia en la que se indicaba "que tres compromisarios de un congreso del partido en Ourense" habían sido contratados por él.

"Ni fueron compromisarios en ese cónclave ni los contrató este presidente", ha rechazado, para añadir que, en cualquier caso, no ocupará su tiempo en "desmentir" determinadas informaciones porque su papel es "gobernar".

Aspiraciones políticas "colmadas"

Sobre las críticas recibidas por haber ocupado el puesto de su padre al frente del partido y de la diputación ourensana, el dirigente popular ha insistido en que el modelo en el que cree es el de la elección directa, que había defendido previamente, y sobre "otras cuestiones", ha asegurado que a "algunos" les gustaría que el presidente de la institución fuese "de otro partido". "Pero no puede ser", ha apostillado.

Tras iniciar su conferencia reivindicando ante Feijóo la "mejoría" de los resultados electorales para el PP en la provincia en las sucesivas citas con las urnas y después de ser preguntado por si se plantea aspirar a liderar el PP de Galicia o a asumir mayores carga de responsabilidad política en un futuro, ha replicado que determinadas preguntas "son ciencia ficción".

"Mis aspiraciones políticas están colmadas, estoy en el lugar en el que me gustaría estar y tengo el apoyo de los miembros de mi grupo de gobierno que se encargan de decirme todos los días lo que hago mal para permitirme mejorar", ha esgrimido Baltar, que ha rechazado dar consejo a Feijóo sobre la fecha electoral.

"Sabe perfectamente lo que debe hacer", ha señalado, para añadir que, si fuese "por partidismo", el presidente gallego ya habría adelantado los comicios autonómicos "hace meses". Previamente, en su discurso, había realizado un guiño a la "ourensanía" y al "galleguismo", al recordar los orígenes ourensanos del Grupo Nós y renovar su voluntad de "no fallar a esos principios".

Por último, Baltar Blanco no ha querido profundizar en el futuro de Novagalicia Banco, pero sí ha animado a los gobernantes a que "hagan todo lo que tengan que hacer", pero "respetando la solvencia, proximidad y las raíces" de las entidades financieras.