Indal en Valladolid producirá 35.000 circuitos electrónicos al año para soluciones luminarias LED lo que supone un paso más para esta planta que se transforma en una fábrica que manufactura componentes electrónicos de última generación, frente a su perfil más mecánico anterior.

Así lo ha explicado el presidente de Indal, Sebastián Arias, durante la presentación este viernes de una nueva área para la producción de soluciones de iluminación con LED de alta eficiencia energética que aportar "claras ventajas de flexibilidad, capacidad productiva, reducción de costes así como una mejora en los tiempos de producción para la compañía que, anteriormente, dependía de proveedores externos".

A diferencia de los sistema de iluminación convencionales, donde los rayos rebotan en el receptor e iluminan sólo el 30 por ciento de la zona, esta nueva tecnología permite lanzar luz horizontal hacia la zona a enfocar y lanzar hacia fuera más allá del 90 por ciento de esa energía con un haz que ilumina más del 50 por ciento de lo enfocado.

Del mismo modo, permite rebajar "todo lo que se quiera" la potencia de iluminación por las noches, frente a la iluminación convencional que sólo se puede rebajar al 60 por ciento, con variaciones de potencia instantáneas, frente a la tecnología tradicional que precisa entre 5 o 6 minutos con un ahorro de energía del 80 por ciento y un "gran confort de visión" que permite ver "colores reales" frente a la "luz amarilla" de la luz tradicional.

Según ha explicado el responsable de I+D de Indal en Valladolid, Miguel Ángel Pérez Galán, la vida útil de una luminaria tradicional es de 16.000 horas frente a las hasta 100.000 que puede alcanzar el sistema LED lo que representa "enormes ahorros" también en mantenimiento o cambio de lámparas con un ahorro de entre el 40 y el 70 por ciento, "dependiendo de la instalación".

Otro de los principales beneficiarios del nuevo área de producción de Indal será el departamento de I+D, que podrá realizar ensayos de producción "prácticamente" en tiempo real y con un mayor abanico de componentes.

Mensaje de esperanza

Para Sebastián Arias, la inauguración de esta nueva área de producción, que ha contado con la presencia del presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, supone "un mensaje de esperanza" y de futuro en el sentido de que "merece la pena seguir apostando por España, por Castilla y León y por Valladolid".

"Sólo inyectando optimismo y esperanza veremos la luz y aquí de luz entendemos una barbaridad", ha bromeado Sebastián Arias, que ha aprovechado la ocasión para significar la "excelente" transformación de la planta vallisoletana con un cambio de visión del negocio hacia lo electrónico y una apuesta por la tecnología LED para lo que se han preparado "intensamente" con la captación de "talento investigador" que ha permitido lanzar desde Valladolid un nuevo producto innovador de primer nivel.

"Somos una de las mejores fábricas de iluminación del mundo", ha aseverado Arias, quien, tras significar también la integración de Indal con la multinacional Philips, ha abogado por trabajar que este gran grupo sienta la fábrica de Valladolid como suya. "Dependerá del esfuerzo y dedicación de todos", ha advertido.

En el mismo sentido se ha pronunciado el presidente de Philips Ibérica, Ignacio Ayerdi, para quien la apuesta por la innovación de Indal, "que no ha sido fruto del azar", ha aclarado, supone una "importante respuesta" a los retos de futuro de la sociedad en el cuidado del medio ambiente y en la búsqueda de la eficiencia resultado además de una innovación "disructiva" que se produce una o dos veces por siglo y que ha situado en esa nueva tecnología LED desarrollada por Indal.

Ayerdi ha confirmado la "fuerte apuesta" de Philips e Indal en su "ambición" por "jugar muy fuerte" en la definición del futuro de las luminarias, máxime en estos momentos de dificultad para los que ha apostado por ser "resiliente", un concepto de una persona capaz de enfrentarse a la realidad pero desde el punto de vista optimista.

El presidente de Philips Ibérica ha confesado por último el "orgullo" de la multinacional en su apuesta por Indal y ha advertido de que no todas las 80 fábricas de Philips podrán adaptarse al "cambio paradigmático" y a la "pelea" por las inversiones. Finalmente, ha significado el "ejemplo de iniciativa positiva" de Indal para lo que necesita el país.