Entre los fallecidos figuran dos de los fugitivos más buscados del país: Saud Homoud al-Oteibi y el marroquí Abdulkarim al-Mejjati, supuesto cerebro de los atentados de Casablanca (perpetrados en mayo de 2003), y además vinculado con el 11-M. Ambos estaban en la lista de 26 radicales más buscados por las autoridades saudíes, que llevan dos años luchando contra Al Qaeda. En Madrid, por otra parte, la comisión de investigación del 11-M rechazó ayer todas las nuevas comparecencias solicitadas por el PP, pero acordó pedir nueva documentación, entre ella, el vídeo de la FAES (presidida por José M. Aznar) sobre los atentados y la grabación de una conversación entre el socialista Fernando Huarte y Abdelkrim Bensmail en la cárcel.