El diseñador gráfico Miguel Lomba ha ganado el concurso que la Ópera de Oviedo ha convocado para elaborar el cartel de la temporada 2012/2013 con un diseño que apela a los sentimientos que el espectador experimenta durante el espectáculo.

El cartel mantiene los colores corporativos de la Ópera de Oviedo (blanco, negro y rojo), destaca el logotipo y pretende retratar las sensaciones que produce este género a través de un rostro sobre el que se superponen los títulos de la próxima temporada, ha explicado Lomba este viernes durante la rueda de prensa de presentación del letrero. Ha estado acompañado por el presidente de la Ópera de Oviedo, Jaime Martínez; la presidenta de la Asociación de Diseñadores Gráficos de Asturias (AGA), Isabel González; y el representante de Ámbito Cultural —promotora de El Corte Inglés—, Alfonso Fuentes.

En realidad, no se trata de un sólo cartel, si no de una serie que parte de la misma composición pero que varía la expresión del rostro para mostrar las diferentes emociones que despierta la ópera, ha añadido el joven diseñador tinetense. Estos se colocarán por toda la ciudad en mupis y también aparecerán en los catálogos.

Este concurso, que forma parte del proyecto 'OPERA y +Artes', pretende canalizar a través de la actividad de la Ópera de Oviedo un proyecto multidisciplinar de creación artística y difundir el trabajo de jóvenes artistas asturianos.

En esta primera convocatoria se han presentado un total de 22 propuestas, de las que el jurado seleccionó siete y, por unanimidad, una ganadora, que fue premiada con 700 euros.

Además, Ámbito Cultural hará una exposición con todos los carteles en los tres espacios expositivos de El Corte Inglés en Asturias.

"un oasis en el desierto"

Por su parte, Isabel González, ha subrayado el "buen hacer" de la Ópera de Oviedo, una de las pocas instituciones que ha convocado un concurso siguiendo los protocolos adecuados y "desde el respeto a los profesionales".

"Es un oasis en el desierto" ha agregado la presidenta de AGA, quien ha agradecido la "receptividad" de la institución cultural. "Desde el principio se me cayó del pensamiento que la Ópera de Oviedo era rancia", ha admitido al respecto.