Sindicatos con representación en Caja Cantabria han valorado la nueva fusión de Liberbank (el banco que conformaron la entidad cántabra, Cajastur-CCM y Caja Extremadura) con Ibercaja Banco y Banco Grupo Caja 3 de forma "positiva", y creen que la incidencia sobre el empleo será "mínima".

Así lo han señalado a Europa Press representantes de UGT y Apecasyc, que han opinado que la integración —que dará lugar al séptimo grupo financiero del país en volumen de actividad, con 114.000 millones de euros de activos, y uno de los primeros en niveles de solvencia y liquidez— afectará "escasamente" o "muy ligeramente" a los puestos de trabajo. Y es que, según defienden, tanto el número de empleados como de oficinas es "perfectamente asumible" por la nueva entidad.

Según han indicado a esta agencia, su "único miedo" es la "solapación" de sucursales y el futuro del personal. En este sentido, donde sí creen que podrían registrarse "problemas" de "duplicidad" es en Extremadura, donde conviven Caja Badajoz y Caja Extremadura, y Aragón, con Caja Inmaculada e Ibercaja, y también en Madrid, aunque la capital es la "zona de expansión".

Por ello insisten en que, "en principio", los puestos de trabajo "no peligran", de modo que podrían darse prejubilaciones o bajas incentivadas, pero no "desvinculaciones", más si se tiene en cuenta que con la nueva integración se busca una entidad "más fuerte y solvente". "No hay ningún indicio que obligue a pensar que corren peligro los puestos de trabajo", han apostillado.

Los representantes sindicales de la entidad cántabra piden que durante el periodo de negociación se garanticen los puestos de trabajo y la viabilidad del nuevo banco, que sumaría 14.000 empleados que hay que garantizar "al máximo", "al cien por cien".

Por su parte, el Sindicato Independiente de Cajas y Afines (CSICA), que representa a 21.000 empleados del sector, ha exigido a los consejos de los tres grupos involucrados en la fusión que "no realicen más recortes de empleo", debido a que, en la actualidad, "no existe excedente de plantilla" en las oficinas implicadas en el proceso.

"Los sindicatos somos conscientes de que los trabajadores temen por su empleo como consecuencia de esta fusión a tres bandas, ya que la medida provocará el solapamiento de oficinas", sobretodo en Badajoz y Aragón.

En este sentido, el portavoz de CSICA en el Grupo Liberbank, Miguel Ángel Rodríguez, ha indicado en un comunicado que, en la comunidad extremeña, la concurrencia de 70 oficinas de Caja Extremadura y Caja Badajoz producirá el cierre de sucursales, "una triste realidad que no debe implicar -añade- un recorte de plantilla, que deberá distribuirse en las oficinas que continúen abiertas".

Sobre este asunto, el sindicato ha mandado un mensaje de tranquilidad a los empleados de las cajas afectadas por la fusión, ya que cuando se firmó el acuerdo laboral con Liberbank ya se produjo la salida de más de 230 empleados.

"En estos momentos", asegura Rodríguez, "no hay excedente de plantilla, todo lo contrario, hay escasez de personal y las oficinas deben estar bien dotadas de profesionales para poder ofrecer buenos servicios a sus clientes, no sobra gente".

Información y negociación

En cuanto a la fusión en sí, los sindicatos de Caja Cantabria han destacado que Ibercaja es una entidad "muy importante y apreciada", con la que tienen "simpatía" y se llevan "muy bien".

Pese a ello, han recibido la fusión "con mucha prudencia", por la "falta de información" de Liberbank, ya que se están enterando de los pasos que se están dando por las otras cajas implicadas en la integración y por los medios de comunicación.

Junto a una mayor información, demandan una buena negociación de cara al peso que tendrá Caja Cantabria en el futuro grupo, en el que el porcentaje de acciones podría pasar del 14% que tiene en la actualidad en Liberbank a cerca de la mitad.