La juez de Sevilla que investiga las irregularidades en numerosos expedientes de regulación de empleo (ERE) tramitados por la Junta de Andalucía ha comenzado a las 11,50 horas de este martes, con casi hora y media de retraso sobre el horario previsto, a tomar declaración como imputado al exdelegado de Trabajo y Seguridad Social de la Junta en Sevilla Juan Rodríguez Cordobés, que fue incluido en el ERE de la empresa Calderinox a pesar de no haber trabajado nunca en la misma.

El interrogatorio, como viene siendo habitual, ha comenzado con cierto retraso, pues el imputado había sido citado a las 10,30 horas, y se está desarrollando en una sala de vistas de los Juzgados del Prado de San Sebastián de la capital hispalense y no en el despacho de la propia juez de Instrucción número 6 de Sevilla, Mercedes Alaya, debido a la presencia de unos 20 letrados personados en la causa.

Con anterioridad al inicio de la declaración de Rodríguez Cordobés, la magistrada ha dado orden a la Guardia Civil para que desaloje a los medios de comunicación del hall situado junto a la sala de vistas donde se desarrolla el interrogatorio del imputado, de manera que una decena de periodistas se han tenido que ubicar inicialmente en otro pasillo del edificio judicial contiguo a la sala de vistas, con el lógico malestar generado por la decisión de la juez, que en comparecencias anteriores sí había permitido la presencia de los periodistas en dicho hall.

Posteriormente, y gracias a la intervención del juez decano, Federico Jiménez Ballester, los periodistas han sido ubicados en una sala de vistas situada frente a aquella donde se está celebrando la declaración, donde hay aire acondicionado, bancos y enchufes donde poder conectar los ordenadores.

Tras la declaración de Rodríguez Cordobés, le tocará el turno a Antonio Fernández Garzón, 'intruso' también en el ERE de Calderinox, y a Luis Llorente Herrero, incluido en el expediente de regulación de empleo de la empresa Aglomerados Morell.