La Secretaría de Igualdad de UGT Extremadura ha criticado la "dificultad" con la que se encuentran las trabajadoras a la hora de solicitar los permisos de lactancia y reducción de jornada debido a la reforma laboral y la actual situación de crisis económica.

A través del Proyecto para la Igualdad de Trato y Defensa en el Empleo, UGT ha detectado un "aumento" de los entornos laborales sin medidas de conciliación.

"Actualmente el mercado de trabajo prioriza el ser más o menos flexible" lo que está repercutiendo negativamente en las madres trabajadoras", indica el sindicato en nota de prensa.

Para la secretaria de Igualdad de UGT Extremadura, Ana Santos, el "miedo a perder el puesto de trabajo por la crisis económica unido a la facilidad que tiene el empresariado para modificar las condiciones de trabajo o despedir legalmente gracias a la reforma laboral, son las principales causas que impiden a las madres trabajadoras ejercer sus derechos de conciliación".

La "discriminación" que sufren las trabajadoras al ser madres "sigue siendo persistente" y el sindicato asegura que la "mentalidad empresarial aboca a muchas madres a una única alternativa acordar un despido sin derecho a indemnización pero salvaguardando su derecho a la prestación por desempleo".

El servicio de consultas de la Secretaría de Igualdad de UGT Extremadura ofrece asesoramiento acerca de las opciones legalmente establecidas.

"La acumulación de la hora de lactancia y la reducción de jornada por cuidado de hijos/as, son los permisos más solicitados por las trabajadoras para conciliar su vida laboral y familiar, pero al mismo tiempo son a los que por la parte empresarial se les interpone más obstáculos para su pleno disfrute", se asegura desde UGT.

Así lamenta que las medidas de austeridad implantadas por el Gobierno "alejan poco a poco a la mujer del ámbito laboral". "La reforma laboral no desarrolla los instrumentos necesarios para llegar a la verdadera corresponsabilidad para que mujeres y hombres participen plenamente en la vida laboral", indica.

Igualmente, UGT condena que "se utilice la crisis económica como excusa para debilitar los derechos fundamentales del conjunto de trabajadores y trabajadoras y dar menos prioridad a las políticas destinadas a la lucha contra la discriminación".