La rectora de la Universidad de Girona (UdG), Anna Maria Geli, ha asegurado que el desalojo de los 25 estudiantes que ocupaban el edificio del rectorado desde el pasado martes era "inevitable", a pesar de ser un hecho que nunca gusta y que hubieran preferido ahorrarse.

En declaraciones a los medios este lunes, Geli ha explicado que ha sido una semana complicada, ya que después de la primera noche los estudiantes habían prometido irse, pero finalmente no fue así y entonces se empezó a negociar y dialogar con ellos.

"Hemos intentado el diálogo, pero cuando vimos que se cerraban indefinidamente y que ninguno de los acuerdos que intentábamos prosperaba, tuvimos que pedir a los Mossos d'Esquadra que iniciaran el proceso de negociación", ha expuesto la rectora, aunque ha explicado que finalmente ha tenido que desalojarse el edificio de Les Àligues.

"La idea a partir de ahora es continuar trabajando con normalidad y esperar que tengamos un fin de curso normal", ha añadido.

Desde el rectorado se descarta totalmente emprender medidas legales contra los jóvenes que han tenido ocupado el edifico durante seis días, ya que no ha habido desperfectos y por tanto no hay motivo de denuncia.

Geli ha reiterado que continuarán dialogando con el Consejo de Estudiantes, aunque ha insistido en que muchas de las peticiones de los jóvenes no dependen de ella ni de la propia universidad.

En relación a las duras críticas que está recibiendo de los estudiantes que reclaman continuamente su dimisión, la rectora ha asegurado que entiende que dentro de su actitud reivindicativa se centren las protestas en su persona.