Unas 70 personas se han concentrado el mediodía de este jueves ante la Subdelegación del Gobierno en Girona para protestar contra la reforma laboral que esta tarde tiene previsto aprobar el Congreso de los Diputados y enviar al Senado.

Representantes de CC.OO. y UGT han representado la "tortura y esclavización" que supone para los trabajadores la reforma con látigos de papel movidos, supuestamente, por Mariano Rajoy y Angela Merkel, bolas de preso y cadenas.

Además, también han cortado el tráfico en dos ocasiones la Gran Vía de Jaume I, una de las principales calles de la ciudad y ante la curiosidad de los conductores han vuelto a representar los latigazos.

"Ésta es una más de las acciones que estamos haciendo en contra de la reforma laboral y no pararemos porque nuestro objetivo es que se retire en su totalidad", ha expuesto la secretaria general de la UGT en Girona, Dolors Bassa, en declaraciones a los medios de comunicación.

Bassa ha criticado duramente que desde la aplicación de la reforma hayan aumentado considerablemente el número de despidos y de expedientes de regulación de empleo (ERE), incluso comparando datos de este mismo año, antes y después de su aplicación.

Ambos sindicatos han lamentado que la reforma se haya hecho con la intención de bajar los salarios y las condiciones laborales de los trabajadores, con la excusa de "vender" más productividad, cuando ésta última no solamente depende de estos factores.