La Guardia Civil, en diversos puntos de verificación establecidos durante la pasada feria de Nuestra Señora de la Salud, ha controlado a un total de 4.687 conductores de los cuales 152 arrojaron un resultado positivo.

En un comunicado, la Benemérita ha señalado que sólo en seis casos de los 152 conductores que arrojaron un resultado positivo en la prueba de alcoholemia han tenido que instruir diligencias como supuestos autores de un delito contra la Seguridad del Tráfico —conducir bajo los efectos del alcohol—, al superar la tasa de 0,60 mg/l de aire, lo que podría suponer penas de prisión de entre tres y seis meses y a la retirada de carné entre uno y cuatro años.

De esta manera, en los restantes 146 casos, la Guardia Civil denunció a los conductores por infracción al Reglamento General de Circulación, por superar la tasa de 0,25 mg/l de aire, sin alcanzar lo que supone incurrir en infracción penal. Así, estos conductores se enfrentan a una sanción de 500 euros y a la detracción de entre cuatro y seis puntos.

Además, en lo que respecta a conducir bajo los efectos de bebidas alcohólicas, la noche que más alcoholemias positivas se detectaron ha sido esta madrugada, del 26 al 27 de mayo, en la que efectivos de la Guardia Civil de Tráfico de Córdoba detectaron un total de 56 alcoholemias positivas.

En los mismos dispositivos, los agentes han efectuado seis pruebas de detección de conducción bajo los efectos de las drogas, resultando cinco de ellas positivas.