Piqué Vidal salió en libertad la madrugada de ayer tras comprometerse a colaborar con la investigación, pero está imputado junto con otros tres presuntos intermediarios que también están en libertad.

Apoyo y asesoramiento

A los imputados se les acusa de dar presuntamente apoyo o asesoramiento legal al blanqueo de dinero procedente del narcotráfico. Esta colaboración se habría hecho al facilitar supuestamente la constitución de empresas instrumentales y la búsqueda de personas que actuaban de testaferros de estas empresas para hacer aflorar el dinero negro de la droga.

La investigación está centralizada en Madrid y la dirige Fernando Andreu, titular del juzgado número 4 de la Audiencia Nacional, pero las actuaciones se llevan a cabo principalmente en Barcelona a través de la Policía Nacional, la Guardia Civil, Vigilancia Aduanera y la Agencia Tributaria.

En la operación de ayer hubo seis registros más en empresas y despachos de abogados y se detuvo a dos empresarios barceloneses que habrían actuado como testaferros, Francisco M. G. S. y Julio César R. G. No se descartan nuevas detenciones.

Piqué: «No estuve detenido»

El abogado Joan Piqué Vidal quiso quitar hierro a su detención e incluso negó que hubiera sido detenido. Su hijo, Josep Piqué, manifestó que su padre fue a la comisaría a declarar respecto a la documentación de un cliente sobre quien se mostró «sorprendido» al saber que lo implicaban en el narcotráfico.

Piqué estuvo asistido legalmente en comisaría por su propio hijo y por Mireia Astor, abogada de su despacho. Pero no se le pudo dejar en libertad «porque no estuvo detenido», aclara Josep Piqué. En cambio, fuentes de la investigación afirman que sí fue detenido tras leerle sus derechos y proceder al registro de su despacho. Quedó en libertad por orden judicial tras tomarle declaración. Según estas fuentes, Piqué reconoció haber tenido contacto con los detenidos del cártel cuando fue requerido para asesorarles. Joan Piqué deberá ahora comparecer ante el juez de la Audiencia Nacional como imputado.

Joan Piqué Vidal: Caída del más influyente

El abogado barcelonés Joan Piqué Vidal afronta el último tramo de su vida (tiene más de 70 años) viendo cómo toda la influencia y poder que llegó a tener se ha desmoronado. El golpe de gracia se lo dio el Tribunal Superior de Justícia de Catalunya cuando en enero lo condenó a siete años de cárcel por cohecho y prevaricación tras actuar en complicidad con el ex juez Lluís Pasqual Estevill. Ambos pactaban pagos que hacían empresarios para evitar la cárcel. Su esplendor fue cuando defendió a Pujol durante los 80. Eso le dio un prestigio que ahora ha perdido del todo.

5 preguntas sobre...

...este caso de ‘lavado’

1 ¿Dónde vendían la droga? Lo hacían en España y tenían una de sus bases en Barcelona.

2 ¿Qué hacían con el dinero que ganaban? Necesitaban blanquearlo para poder enviarlo de forma legal fuera de España.

También recibían dinero de otros países, que invertían aquí en operaciones inmobiliarias.

3 ¿Cómo lo blanqueaban? Gracias al asesoramiento legal a través de contactos en Barcelona pudieron crear empresas tapadera sin ninguna actividad real, pero que convertían en dinero limpio todo lo que conseguían de la droga.

4 ¿Cuál fue la primera pista? Un maletín con 5,5 millones de euros que se incautó el pasado 17 de marzo en el aeropuerto del Prat cuando pretendían llevar el dinero clandestinamente en un avioneta privada que vino de Chicago (EE UU) y se dirigía a Gandeer (Canadá).

5 ¿Cómo introducían la droga en España? La camuflaban en importaciones de defensas de caucho.