Agentes del Cuerpo Nacional de Policía han detenido a un hombre de 47 años, de nacionalidad portuguesa pero residente en Gijón, acusado del robo de juguetes de colección y cuadros valorados en más de 25.000 euros. También se detuvo a otro hombre que se encargaba de vender en el Rastro los objetos sustraídos.

Según una nota de la Comisaría gijonesa, la investigación se inició el pasado día 14, cuando el propietario de una nave sita en Jove denunció la sustracción de una gran cantidad de coches y trenes de colección de gran valor económico que estaba preparando para una exposición. De la nave también se llevaron tres cuadros de dos pintores de reconocido prestigio, valorados en más de 15.000 euros.

La investigación, desarrollada por el Grupo Primero de Policía Judicial, se centró en el círculo de personas más cercano al denunciante, que pudieran conocer tanto la localización de los objetos como su valor. Además, las puertas de la nave no habían sido forzadas y el lugar no presentaba ningún desperfecto. También se indagó en los posibles canales de comercialización de estas piezas, tanto vía Internet como establecimientos de compra venta de segunda mano.

Esto llevó a los agentes hasta uno de los vendedores habituales del Rastro de Gijón, quien estaba ofreciendo la venta de trenes de juguete antiguos pidiendo por cada uno seiscientos euros, teniendo en cuenta que son reliquias difíciles de conseguir, muchas de ellas adquiridas en el extranjero.

Asimismo, uno de los agentes fingió estar interesado en adquirir varios artículos y ponerse en contacto con su poseedor, lo que conllevó el que pudieran detener al supuesto autor de los robos, un ex empleado del propietario de los objetos que había sido despedido en el mes de marzo y que contaba con antecedentes policiales por delitos contra el patrimonio.

Gracias a ello, se recuperaron en ese momento varios tramos de vía, una locomotora y nueve vagones y en el registro de su domicilio fueron hallados además los tres cuadros y 27 coches de miniatura. Posteriormente se detuvo al receptador, vecino de Gijón de 49 años, encargado de la venta de los trenes en el mercadillo dominical.