Un hombre de nacionalidad británica ha sido detenido por agentes de la Policía Nacional en el municipio malagueño de Alhaurín el Grande por, presuntamente, encerrar a su expareja y a sus dos hijos de menores de dos años en su vivienda.

Durante los días que estuvieron privados de libertad supuestamente amenazó a la mujer con una pistola y le causó diversas lesiones. La víctima, que había puesto fin a su relación el pasado mes de enero y regresado a Inglaterra, viajó nuevamente a España junto a su hermana durante unos días para que el progenitor pudiera ver a los niños, momento que al parecer aprovechó para encerrarla.

Fue la hermana de ella, a quien el arrestado permitió volver a Reino Unido, quien denunció el pasado 9 de mayo a la Metropolitan Police lo sucedido y estos alertaron a los investigadores españoles gracias a los mecanismos de cooperación policial internacional, según ha informado la Policía Nacional en un comunicado.

Concretamente, el Serious Organised Crime Agency (SOCA) informó al enlace de la embajada británica en Madrid, quien comunicó de forma urgente lo sucedido a la Sección de Secuestros y Extorsiones de la Comisaría General de Policía Judicial.

Las primeras averiguaciones realizadas sobre el presunto autor del rapto indicaban que hace dos años había huido a España, en compañía de su pareja, aprovechando un permiso carcelario por un crimen cometido en 1993. Año y medio más tarde, la mujer puso fin a la relación y a principios de 2012 decidió regresar a su país con los niños. A pesar de las amenazas que recibió en un primer momento, posteriormente mejoró la situación familiar con el ahora detenido, por lo que pensó volver a España para que pudiera ver a sus hijos.

De este modo, la víctima acordó con el hombre que el pasado 2 de mayo llegaría a España, donde permanecería cinco días, junto a una familiar y los dos hijos. Sin embargo, sólo dejó volver a Reino Unido a la familiar, quien narró a los agentes británicos las amenazas y lesiones a las que era sometida su hermana, entre las que citó amenazas con un arma, cortes en el cuello o no facilitarle la medicación necesaria para combatir el asma.

Amplio dispositivo de vigilancia

Los investigadores españoles comprobaron que el presunto responsable del rapto residía en una urbanización de Alhaurín el Grande bajo una identidad falsa. Establecieron entonces un amplio dispositivo de vigilancia en las inmediaciones de su domicilio que culminó con su localización y detención cuando iba a bordo de un vehículo.

Cuando los policías le preguntaron por la dirección exacta donde estaban su expareja y los niños dijo que nunca la encontrarían. Finalmente, y gracias a las indicaciones facilitadas por la hermana, se pudo encontrar la vivienda, cerrada con llave, en cuyo interior se localizó a la mujer y los niños.

En el registro del inmueble se encontraron dos pistolas, una de ellas simulada pero manipulada para poder disparar. El arrestado tenía en vigor una Orden Europea de Detención y Entrega dictada por las autoridades británicas. La operación ha sido realizada por la Sección de Secuestros y Extorsiones de la UDEV Central de la Comisaría General de Policía Judicial.