Condenado a tres años y seis meses el acusado de golpear a un joven con un martillo en la cara

En lugar de los 10 años que pedía el Fiscal
Juicio Contra El Acusado De Golpear A Un Joven Con Un Martillo
Juicio Contra El Acusado De Golpear A Un Joven Con Un Martillo
EUROPA PRESS
Juicio Contra El Acusado De Golpear A Un Joven Con Un Martillo

El acusado de golpear a un joven con un martillo en la cara, en enero de 2010 en Unquera, se ha declarado culpable de los hechos que se le imputan y ha aceptado la pena de tres años y seis meses de prisión, así como una orden de alejamiento de 300 metros de la víctima, su vivienda y centro de trabajo durante diez años.

Además, con anterioridad a la vista, que iba a empezar este lunes en la Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Cantabria, y que no ha llegado a celebrarse al alcanzarse un acuerdo entre las partes, el acusado, Cristian S.G., que tenía 26 años cuando ocurrieron los hechos, ya ha abonado una "buena" parte de las indemnizaciones correspondientes a la víctima y los costes del Servicio Cántabro de Salud (SCS).

Según relata el escrito del acuerdo al que han llegado el Ministerio Fiscal, la acusación particular y la defensa, el acusado ha hecho un "importante esfuerzo" y ha presentado "garantías" para abonar, en pagos anuales, la totalidad de la indemnización y los costes del SCS.

Esta indemnización, según ha detallado el abogado de la acusación, se aproxima a los 143.000 euros que pedía el Ministerio Fiscal y no a los 164.322 que solicitaba la acusación particular. Los costes del SCS ascienden a 24.203 euros y derivan de la cirugía estética y un implante ocular que tuvo que realizársele a la víctima, con 17 días de ingreso hospitalario, así como del posterior tratamiento.

Los hechos ocurrieron en enero de 2010, en la localidad cántabra de Unquera, cuando Cristian acudió, sobre las 4.00 horas, a un pub en donde se encontró con un grupo de conocidos con los que tenía "enemistad". Este encuentro derivó en una discusión y un posterior forcejeo dentro del local, por lo que los responsables del mismo le separaron del grupo y le echaron del pub.

El acusado, con "animo de venganza", según indica el escrito, fue hasta su coche y sacó un martillo que tenía en la caja de herramientas, y se escondió en un callejón cercano al local y por el que sabía que el grupo tenía que pasar cuando lo abandonasen.

Cuando minutos después el grupo pasó, Cristian esgrimió el martillo y golpeó a la víctima causándole un "gran daño". El resto de las personas del grupo le agarraron para que no siguiese golpeando al joven, al que auxiliaron, tras lo que el acusado hizo desaparecer el martillo.

Fruto del martillazo, a la víctima le "estalló" el globo ocular derecho y tuvo varias fracturas en el cráneo y en la nariz. La cirugía y el tratamiento de estas lesiones han mantenido al joven 253 días inhabilitado, y, además, ha perdido la visión del ojo izquierdo, donde también tiene una cicatriz, a lo que se suma otra cicatriz en la cabeza.

El acusado ha cumplido, desde que ocurrieron los hechos, un año y medio de prisión provisional que se le restarán de la pena de tres años y seis meses que ha aceptado, muy por debajo de la de 10 años que pedía el Ministerio Fiscal, y de la de 12 que solicitaba la acusación particular.

La sentencia contempla la agravante de alevosía y la atenuante de reparación del daño.

En cuanto a la orden de alejamiento, el acusado finalmente cumplirá los 10 años solicitados por la acusación particular, frente a los cinco que pedía el Ministerio Fiscal.

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