"El federalismo no es la panacea de la facilidad ni el instrumento para resolver el problema de los nacionalismos". Son palabras de Xavier Arbós, uno de los tres catedráticos de Derecho Constitucional que ha participado esta tarde en una nueva edición de los diálogos organizados por las Cortes de Aragón y la Fundación Manuel Giménez Abad, en este caso bajo el título de 'Las caras del nacionalismo'.

Este profesor de la Universidad de Gerona ha estado acompañado en el Palacio de la Aljafería por sus homólogos de los centros superiores de Santiago de Compostela y la Universidad Autónoma de Madrid, Roberto Blanco y Juan José Solozábal respectivamente.

Medio centenar de personas han participado en un debate que el propio Blanco ha calificado como "vivo, apasionante y vibrante". "El federalismo es una perspectiva normativa, un principio sobre cómo debe organizarse el poder", ha definido Arbós. Este catedrático se ha preguntado además "de qué te sirve tener competencias si no tienes recursos para afrontarlas". "Este es un problema importante. Una dimensión crucial, imprescindible", ha comentado a este respecto.

Sobre el modelo español, ha defendido que, en su opinión, "no es un régimen federal". "Si España se convirtiera en un Estado federal, tendríamos claras algunas reglas. Se cerraría la discusión entre vías abiertas. Cuando tengamos instituciones creíbles, ya que la partidocracia las contamina, cuando los federalistas digan lo que tienen que decir, a lo mejor los nacionalistas de uno y otro lado, se empiecen a plantear una verdadera autonomía de España", ha comentado este catedrático. "La legitimidad de un sistema casi federal es el peor problema, a veces quedarse a medias genera dificultades", ha añadido Arbós en este mismo sentido.

Por su parte, las palabras de Roberto Blanco han evolucionado en otro sentido. "No hay duda de que España es un estado federal. Cuando se habla de federalismo, nuestro país tiene que ser incluido. La preocupación principal es si el federalismo es verdaderamente una técnica que sirve para resolver las reivindicaciones nacionalistas", ha comentado.

Para este profesor de Santiago de Compostela, autor de una obra reciente con el análisis de once países diferentes, "la conclusión que uno obtiene es que las características que se enumeran no son más que una generalización". "Los federalismos son muy diferentes entre sí igual que lo son los parlamentarismos", ha comentado.

En relación a las cámaras, para Blanco "no hay ninguna de auténtica representación". "Hay senados con igualdad, otros no, y hay algunos como España que son un auténtico disparate. El Bundesrat es el único más representativo", ha comentado este catedrático.

En relación a los nacionalismos, también ha defendido su falta de utilidad para resolverlos. "El federalismo sirve para organizar la diversidad, pero el nacionalismo es una cosa distinta. El problema para el Estado autonómico viene de los nacionalismos. La dificultad de nuestro Estado tiene que ver de esto, el estado federal creado no ha servido para resolver el problema. No se puede integrar a quien aspira a tener un estado propio", ha manifestado el catedrático.

El diálogo entre estos dos profesores ha estado moderado por Juan José Solozábal, de la Universidad Autónoma de Madrid. Para él, en relación al federalismo "hay muchísimos temas que resultan de interés por pertinencia y claridad". "Me ha parecido particularmente importante la distinción que se usa entre diferencia, heterogeneidad y asimetría, para entender la pluralidad de nuestro Estado", ha comentado este catedrático.