Aralar ha decidido trasladar al Parlamento Europeo su "preocupación" por las prospecciones que se desarrollarán Álava para conocer la viabilidad de los proyectos de extracción de gas no convencional.

En un comunicado, la formación ha afirmado que ha llevado esta cuestión a Europa "tras la negativa del Gobierno vasco a realizar la evaluación de impacto ambiental" de las prospecciones que tiene previsto desarrollar en los emplazamientos Gran Enara, en el territorio alavés.

Gran Enara es parte del yacimiento de 1.400 kilómetros cuadrados donde, a unos 2.000 metros de profundidad, se calcula que se encuentran reservas de gas no convencional. Este tipo de combustible se encuentra adherido a la roca subterránea, por lo que requiere de estimulación externa para salir a la superficie.

Dicha estimulación, si las prospecciones corroboran la viabilidad del proyecto, se llevará a cabo mediante la técnica de fracturación hidráulica o 'fracking', que consiste en introducir en la roca grandes cantidades de agua, arena y elementos químicos a gran presión, con lo que se consigue despegar el gas de la piedra y se posibilita su extracción.

Aralar ha señalado que sobre la zona en la que se van a realizar las prospecciones se haya un acuífero "de gran importancia", el de Subijana, situado a 400 metros de profundidad. En este sentido, ha asegurado que la explotación del yacimiento mediante 'fracking' "conlleva un riesgo importante de contaminación de acuíferos".

Comisión europea

Por ello, Aralar ha planteado varias preguntas sobre el tema a la Comisión Europea por medio de la coalición Europa de los Pueblos de la que forma parte.

Las preguntas realizadas al comisario de Medio Ambiente se refieren a la obligatoriedad de realizar la evaluación de impacto ambiental en proyectos de prospección del yacimientos de gas no convencional.

A su vez, la formación ha preguntado a la comisión si la "negativa" del Gobierno vasco a realizar la evaluación de impacto ambiental está en consonancia con las políticas impulsadas por la comisión y, en concreto, con la directiva de Evaluación de Impacto Ambiental.