Kevin Feige temía perder su trabajo por Viuda Negra

De lejos, Kevin Feige puede parecer un águila de los negocios y un controlador implacable del producto Marvel. Un señor de esos a quienes los directores y guionistas temen, pero que enamora a los ejecutivos. Sin embargo, el mandamás de la Casa de las Ideas en cine ha llegado a temer por su puesto de trabajo. Así lo ha recordado Mark Ruffalo, en unas declaraciones que hielan la sangre.

¿Qué fue lo que puso a Feige al borde de un ataque de nervios? Pues su decisión de incluir a Viuda Negra (Scarlett Johansson) en el reparto de Los Vengadores, allá por 2012. Una decisión que, como sabía, implicaría un choque con Ike Perlmutter, entonces presidente de Marvel Entertainment y fiel creyente en que las mujeres (y las minorías raciales, y los personajes LGBT, etcétera) eran veneno para el negocio.

Habla Mark Ruffalo, en declaraciones para The Independent (vía ScreenRant): "Cuando rodamos Los Vengadores. Kevin Feige me dijo: 'Escucha, lo mismo no estoy aquí mañana. Ike [Perlmutter] no cree que nadie vaya a ver una película de superhéroes con una chica entre los protagonistas. Así que, si sigo aquí mañana, sabrás que he ganado la batalla".

Y vaya que si la ganó, aunque su victoria definitiva llegaría tres años después. En 2015, Kevin Feige acudió a sus 'primos de Zumosol' (es decir, a Bob Iger y Alan Horn los mandamases de Disney) para quitarse de en medio a su rival. A partir de ese momento, Feige se convirtió en el amo absoluto de Marvel en la pantalla, mientras que Ike Perlmutter quedó relegado a la división televisiva del estudio.

Dado que Ike Perlmutter fue el responsable de que Viuda Negra no tuviese película en solitario, la victoria de Feige nos alegra un poco. Y, a Mark Ruffalo, directamente le entusiasma: "[Feige] ha cambiado todo el Universo Marvel", explica. "Ahora tenemos un superhéroe gay en camino, tenemos superhéroes negros, superheroínas… Ningún otro estudio está siendo tan inclusivo".