El secretario general de CCOO de Asturias, Antonio Pino, ha llamado a UPyD a la "responsabilidad" para propiciar un Gobierno estable en el Principado. Así, ha sostenido que las principales cuestiones para los asturianos son el empleo, la economía y los servicios públicos "y no otros temas que, aunque importantes, no son prioritarios", en referencia a la eliminación de las tres circunscripciones electorales que el partido de Ignacio Prendes ha puesto como condición para apoyar a una opción política.

En rueda de prensa, Pino se ha referido en estos términos a las negociaciones que los diferentes grupos con representación en la Junta General del Principado están manteniendo para formar Gobierno en Asturias. Durante estas conversaciones UPyD ha condicionado su apoyo a la reforma de la ley electoral. Durante la comparecencia, el secretario general de CCOO ha estado acompañado por sus homólogos en UGT y USO, Justo Rodríguez Braga y Francisco Baragaño, respectivamente.

"Es malo que alguien aproveche un juego de números y lo haga desde la irresponsabilidad y la mercadería", ha añadido Pino, quien ha asegurado que, "con el tiempo", esta actitud "se acaba pagando".

Lo mismo ha opinado Rodríguez Braga, quien ha recordado al partido magenta que "ya es hora de tomar decisiones con convicción, valentía y mirando los intereses de los asturianos". El resto, ha dicho, "son enredos y el más perjudicado va a ser UPyD".

Precisamente esta situación de incertidumbre política que vive Asturias, y que podría condicionar la aprobación de un plan económico, ha sido una de las razones por las que el Ministerio de Hacienda está estudiando la posible tutela de las cuentas del Principado, ha apuntado Baragaño.

Sin embargo, para los sindicatos, esta medida "suena más a intereses políticos partidarios", según Antonio Pino, que ha asegurado que hay otras Comunidades Autónomas "con déficit y una gestión de aquella manera".

Justo Rodríguez Braga ha agregado que el anuncio de Hacienda "entra en la pelea de Foro y PP", representantes de la derecha asturiana y española, que está utilizando a la región "como elemento de confrontación".

En cualquier caso, la posible intervención supone "una puñalada política a Asturias y a los asturianos", según el secretario general de UGT.