Por eso es fundamental conocer cuáles son las que requieren un mayor cuidado y, siempre que las vacaciones no sean muy largas, seguir una serie de consejos para encontrarlas vivas a la vuelta.
Consejos
Mediterráneas: Las hiedras, buganvillas, geranios y, en general, las plantas mediterráneas aguantan muy bien el calor. Las plantas de interior sufrirán más el verano, ya que su fuente de agua es artificial. Es importante alejarlas de la luz directa del sol.
Botellas: Para asegurarles el suministro, se pueden colocar botellas de agua semienterradas boca abajo con un pequeño agujero en el tapón. Así la planta irá ‘bebiendo’ cada vez que lo necesite.
En la bañera: No se deben dejar nunca en la bañera en contacto directo con el agua. La tierra se encharcará y las raíces pueden pudrirse.
Ladrillos: Se pueden colocar sobre ladrillos, que, por ser absorbentes, mantendrán las macetas húmedas.
Cordones: Uno de los mejores trucos es colocar las macetas cerca de varios cubos con agua y conectarlas con ellos por unos cordones gruesos. Estos llevarán el agua al tiesto dependiendo de las necesidades de la planta.
Conservar los jardines
Por su extensión de tierra, que permite a las plantas desarrollar largas raíces en busca de agua, y por su condición de plantas de exterior, los jardines suelen ser zonas menos problemáticas a la hora de afrontar el verano.
Sin embargo, para evitar sorpresas desagradables a la vuelta conviene limpiarlo bien de malas hierbas antes de irse de vacaciones, así como crear suficientes sombras para las plantas más delicadas y proteger el suelo de la evaporación cubriéndolo con hierba cortada.
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios