La Universidad de Castilla-La Mancha lamenta la pérdida de uno de sus doctores más ilustres, el escritor mexicano Carlos Fuentes. El autor de Terra Nostra, entre otras obras maestras, recibió la más alta distinción de la UCLM hace siete años, en una ceremonia en la que reivindicó la pluralidad ideológica y el recurso a la ficción para combatir el totalitarismo.

En un discurso plagado de referencias al Quijote, la universidad ha recordado que Fuentes subrayó la vigencia de esta obra no sólo como precursora de la novela moderna y ejemplo de la construcción de personajes, sino también en su faceta más política, en la contraposición que establece entre el idealismo y el realismo, como clave para entender el mundo contemporáneo.

De hecho, el escritor calificó de "un gran privilegio" la recepción del doctorado honoris causa por la Universidad de Castilla-La Mancha, "corazón de los territorios del Quijote", y asumió tal distinción "como ciudadano de México, hermano de Hispanoamérica y escritor de la lengua castellana".

El responsable de la laudatio -discurso de justificación del doctorado- fue el profesor Matías Barchino, quien destacó las cualidades artísticas e intelectuales de Carlos Fuentes.

La investidura honoris causa de Carlos Fuentes se celebró el 20 de abril de 2005 en el Paraninfo Luis Arroyo del Campus de Ciudad Real. Más de un millar de personas asistieron al acto académico, presidido por el ex rector de la UCLM, Ernesto Martínez Ataz, y en el que también participaron la por entonces ministra de Cultura, Carmen Calvo; el expresidente del Gobierno español Felipe González, el periodista y escritor Juan Cruz o el empresario Plácido Arango, entre otras personalidades.