Una cincuentena de miembros de los indignados han conmemorado el primer aniversario del movimiento 15M con una acción de protesta en la oficina de La Caixa de la calle Santa Clara de Girona, donde dos chicas se han encadenado dentro de la oficina y han montado dos tiendas de campaña.

Pasadas las 12.00 horas han irrumpido en la oficina con una pancarta en la que podía leerse 'La Caixa nos encadena a la miseria, que la crisis la paguen los ricos' y han asegurado que no se moverían hasta que les echaran.

Una parte del colectivo bloqueaba la entrada aunque hasta las 14.00 horas la actividad en la oficina ha continuado con normalidad; momento en el que el director de la oficina ha pedido a la veintena de jóvenes que estaban en el interior de la oficina que se marcharan porqué tenían que cerrar.

La respuesta de los jóvenes ha sido negativa y no han querido salir, rodeando entonces a las dos chicas formando una cadena humana.

Poco antes de las 14.30 horas han llegado los Mossos d'Esquadra, aunque con anterioridad habían llegado agentes de paisano, y en ese momento han entrado unos cuarenta agentes a la oficina mientras que los antidisturbios de la policía catalana han echado a los indignados que bloqueaban la puerta.

Finalmente, uno a uno, los agentes han "arrancado" a los miembros del colectivo y les han identificado —a uno de los miembros se lo han llevado a la comisaría porqué no tenía ningún documento que le identificara— y así han conseguido dejar la oficina solamente con las dos encadenadas.

Entonces han llegado los Bomberos, que han serrado los dos tubos que cubrían los brazos de las chicas y después han cortado las cadenas que las unían.

El movimiento 15M de Girona celebrará una asamblea este martes a las 20.00 horas para decidir cuales son las siguientes acciones.

A esta hora todavía no se sabe si los identificados están imputados o no por un delito de allanamiento de morada.