La Universidad de Cantabria (UC) ha hecho ya una retención de gastos por un importe de entre 2 y 2,5 millones de euros, y estudia ahora cómo llegar a los 4,7 millones que les han "impuesto", pero sin que este ajuste incida de forma "drástica" en la calidad de la enseñanza y la investigación o en el empleo en la institución que, "en principio", no se verá afectado.

Así lo ha dicho este martes el rector de la UC, José Carlos Gómez Sal, que ha respondido, durante la presentación de los Cursos de Verano, a preguntas de los periodistas sobre los recortes exigidos a la institución.

Según ha explicado, las "pre-retenciones" planteadas se refieren a "cosas importantes pero no fundamentales", incluidas en el capítulo de gastos corrientes, como por ejemplo ayudas para viajes.

En cualquier caso, Gómez Sal ha asegurado que estos ajustes no afectarán a los puestos de trabajo, que no van a "peligrar", ni a la calidad educativa.

Ha indicado al respecto que la "gran mayoría" de la plantilla de la UC son funcionarios y, además, se trata de puestos que están "plenamente justificados".

Aún así, aunque "en principio" los recortes no repercutirán en el empleo, el rector ha admitido que "quizás" haya "algún reajuste" entre los puestos de asociados y cuando no sean "absolutamente fundamentales" para las labores de docencia.

En este punto, ha recordado que la UC cuenta en la actualidad con más de 700 trabajadores asociados, y ha precisado que los profesores de este perfil dan clases en asignaturas y materias concretas relacionadas con su profesión.

Se trata, ha agregado Gómez Sal, de docentes que colaboran con la universidad por horas, y que esta colaboración se renueva todos los años.

En lo que no se van a traducir los ajustes es una merma de la calidad de la investigación, que incluso este año ha sido "espectacular" en proyectos concretos. "Radicalmente no", ha contestado el rector, que ha puntualizado que sí se puede producir dicha merma en los ingresos, es decir, en la captación de dinero para esta labor.

Con todo ello, Gómez Sal ha señalado que la UC todavía está "haciendo los deberes", es decir, haciendo estudios y análisis para "afrontar los recortes con gran dolor de nuestro corazón" y que no les que da "más remedio" que acometer.