El maestro de un colegio de Castellón acusado de nueve delitos continuados de abuso sexual sobre alumnas y de un delito de corrupción de menores, para el que el fiscal pide 35 años de prisión, ha señalado este lunes en la primera sesión del juicio que los supuestos tocamientos que aparecen en las fotografías que le intervinieron corresponden a "gestos normales de la marcha de la clase" y ha asegurado que él no ha cometido los delitos de los que se le acusa.

Así, ha asegurado que las fotos "están hechas de muchas maneras y en muchos momentos", que reflejan "actos naturales y sin ninguna intención", y que quería hacer con ellas un archivo "al igual que archivaba material de otro tipo", pero "no hay una motivación concreta como de lo que se me acusa", ha apuntado.

"Yo no hago fotos de glúteos, pechos y piernas a propósito, sino que hago fotos en general y no hay una casuística para cada foto", ha añadido.

El acusado ha declarado que en las fotografías, que a veces utilizaba para determinados trabajos de clase, reflejaba "la espontaneidad de los menores, pero no hay un enfoque claro, ya que a veces enfocaba su cara y aparecía la espalda o la parte de abajo del cuerpo porque se giraban". Así mismo, ha señalado no tener ninguna atracción erótica o sexual hacia las menores ni ninguna queja de los padres sobre los hechos que se enjuician.

Ha reconocido que es posible que, en ocasiones, diera alguna palmada en el culo a los alumnos al entrar o salir de clase, así como abrazos o besos para animarles o reconocer un trabajo bien hecho "pero como algo natural" y que no era "especialmente afectuoso" con ellos, sino que tenía con los menores una relación de "confianza y respeto". "Si hubiera querido hacer algo de lo que me están acusando, es evidente que no hubiera entregado las tarjetas con las fotos y que me hubiese desecho del cuerpo del delito", ha destacado.

El acusado ha indicado que había autorizaciones de algunos padres para poder hacer fotos a los alumnos y, a preguntas de la abogada de la acusación de por qué no se encontraron, ha respondido que "el hecho de que no las encontraran o no las buscaran adecuadamente no significa que no estuvieran allí". EXPEDIENTE

A preguntas de su abogado sobre un expediente disciplinario que se le abrió en otro centro docente donde trabajó por supuestos tocamientos a una alumna, el acusado ha indicado que, tras realizarse una investigación, no hubo sanción y sólo se le pidió que solicitase un traslado voluntario debido a la presión existente.

Tras el acusado, han declarado varios agentes de la Policía Nacional que le detuvieron y visionaron el contenido de la cámara de fotos y las tarjetas que se le incautaron. Los policías han señalado que fueron varias mujeres las que alertaron de que el acusado estaba haciendo fotos a los alumnos menores de otro colegio distinto al que trabajaba.

Cuando localizaron al acusado y comprobaron el contenido "de índole sexual" de las fotografías fue cuando decidieron detenerle, según los agentes, que han explicado que algunas imágenes estaban tomadas en el interior de aulas en las que trabajaba el profesor, donde aparecían glúteos, piernas y zonas genitales, así como tocamientos a las menores.

Al ser preguntado por las razones por las que realizaba las fotos, según los policías, el acusado indicó que tenían una "finalidad artística" y que las tomaba para captar la "espontaneidad" de los niños.

Los agentes también han declarado que la directora del colegido donde trabajaba el acusado les indicó que otros profesores habían tenido sospechas sobre su "comportamiento extraño", ya que hacía fotos "de forma disimulada" pero que no se habían tomado medidas porque no se tenían pruebas evidentes.

La acusación particular de una de las menores pide, al igual que el fiscal, 35 años de prisión para el acusado, mientras que la defensa solicita la libre absolución. El juicio continuará este martes con la declaración de los padres de las víctimas y de las propias menores, parte ésta última que se realizará a puerta cerrada, según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana.