El presidente de la Generalitat valenciana, Alberto Fabra, se ha mostrado "convencido" de que la Comunitat no será intervenida por el Gobierno central, pues ha asegurado que la Administración valenciana "está trabajando y muy comprometida con la reducción del déficit y no gastar más de lo que ingresa". Además, ha mostrado su confianza en el que el plan de estabilidad financiera del Consell obtendrá el visto bueno del Gobierno central.

El jefe del Ejecutivo valenciano ha realizado estas declaraciones a los medios de comunicación tras inaugurar el nuevo Ayuntamiento de la localidad castellonense de Almassora.

Fabra considera que el plan de ahorro de la Generalitat valenciana que se va a remitir este lunes al Gobierno central va a contar con el visto bueno pues "se ha hecho un esfuerzo muy importante, como todas las comunidades".

"Se ha establecido cuál es nuestro plan de ahorro, con mucho esfuerzo y sacrificio y, desde luego, con el compromiso de ayudar al Gobierno de no excedernos de ese déficit, que en nuestro caso es del 1,5", ha añadido.

Así, Fabra ha asegurado que "no va a haber ninguna intervención", y ha reconocido que "es cierto que, en un momento determinado, se empezó a hablar de intervención de alguna comunidad autónoma y alguno barajó el nombre de la nuestra", pero ha asegurado que la Comunitat Valenciana, "desde hace ya mucho tiempo, está trabajando y muy comprometida con la reducción del déficit y no gastar más de lo que ingresa".

Ganar credibilidad

Al respecto, ha recordado las últimas medidas adoptadas "encaminadas a ese sentido". Según ha dicho, "llevamos desde el primer día haciendo todo aquello que permita ganar en credibilidad, seguir ahorrando en la administración y mantener el mismo nivel de servicios y calidad dirigidos a todos los ciudadanos".

Preguntado si con la gestión público-privada de los hospitales se van a crear fórmulas para que estos gestores asuman parte del personal sanitario, Alberto Fabra ha señalado que el personal lo tiene que asumir la Generalitat, y ha reiterado que "aquí lo que hemos hecho es dar la posibilidad de colaborar con financiación privada en todos aquellos servicios que no sean los de personal o inversión, que seguirá asumiendo la Generalitat".

De este modo, ha añadido que en el caso en que fuera necesario más personal para esos servicios, sí que tendrán que asumirlo "lógicamente" esas empresas.

"Esto va a funcionar igual que antes, lo único es que se nos está exigiendo no sólo por parte del Gobierno central o de la UE, sino que es una cuestión de responsabilidad, es decir, tenemos que seguir haciendo lo mismo y ahorrar dinero", ha asegurado Fabra, quien ha añadido que el ciudadano "seguirá teniendo los mismos médicos, en los mismos sitios y los mismos tratamientos y nosotros buscamos un modelo que nos permita ahorrar dinero para no pedir a los ciudadanos que hagan más esfuerzos en contribuir a mantener la administración".

Según Fabra, "lo único que buscamos es un modelo que ya se ha puesto en práctica en otros sitos que permite ahorrar entre un 10 y un 15 por ciento". Al respecto ha destacado que la calidad se mantendrá y ha puesto como ejemplo "ante las personas que ahora critican o que tengan dudas" el modelo de Alzira "que es parecido en cuanto a que el personal dependerá de la Generalitat y, además, tenemos instalaciones creadas, cuando aquel modelo partía de cero".

El modelo Alzira, según el presidente de la Generalitat, "también levantó muchas dudas y ahora somos una Comunidad de referencia para otras muchas que están copiando ese modelo en sus territorios". "Ahora vamos a mantener esa experiencia que fue positiva en cuanto a esa colaboración público-privada y que nos permite un ahorro sustancial, además manteniendo los niveles de calidad del servicio".