Los adolescentes beben más, antes y no ven riesgo

El 66% dicen que beben y el 30%, que se emborrachan cada fin de semana. Empiezan a los 13 años. Cuanto más propina les dan, más gastan en beber.
«No hay que alarmarse, pero sí preocuparse». Este es el pensamiento, a buen seguro compartido por muchos padres, de la Concejalía de Acción Social, que ha mandado elaborar un estudio sobre el consumo de alcohol en Valladolid de los adolescentes de entre 14 y 18 años. La principal conclusión es que se bebe más cantidad y a una edad más precoz (empiezan entre los 13 y 15 años). Además, la mayoría no percibe el riesgo que supone el consumo excesivo de alcohol.

Tras más de 1.000 entrevistas y charlas, tanto en colegios y asociaciones como en botellones, bares, discotecas o en las actividades del Vallanoche, el informe indica que las chicas y chicos se han equiparado, es decir, beben casi lo mismo.

Los datos

Dos de cada tres reconocen que beben: Y el 30% (aproximadamente uno de cada tres chicos), que se emborracharon el último fin de semana. Además, un 65% se embriagaron en el último año.

El 53% aseguran que todos sus amigos consumen: Al 61% no les importa, pero el 36% indican que hay veces que les molesta que sus colegas beban.

El fin de semana, cubatas y chupitos: De lunes a viernes se lleva más la cerveza y los chupitos, porque los cubatas ni los prueban.

El 1,9% eligen el botellón como el ocio preferido: El 40% prefieren los bares y las discotecas. El 12,7% no especifican mientras sea con sus amigos. El 16,7% optan por ir a ver espectáculos (música, teatro) y el 8,7%, el deporte. A otro 8,7% lo que les gusta es viajar.

El 82% afirman que se lo pasan bien sin beber: Y el 60% que no se liga más por ir con el puntillo. Sin embargo, el 53% creen que facilita hablar con la gente.

Otras conclusiones del estudio

El consumo en el entorno familiar afecta: El adolescente bebe más y tiene menor percepción del riesgo que supone.

La información es útil para que perciban el peligro, pero...: ... No es suficiente. Familias y administraciones deben ir más lejos, ya que hay jóvenes que sí perciben el riesgo, pero beben igual que los que no. Debe lanzar mensajes para no beber, pero éste no debe ser «no bebas».

El adolescente debe ser parte activa en las alternativas de ocio: Es mejor que el joven se habitúe a otras actividades distintas que una prevención específica contra el alcohol.

Cuanto más propina, más gastan en beber: Y cuanto más tarde llegan, peor. Al 43% le dan entre 6 y 12 1. Un 20% llega más tarde de las 2 de la mañana. El resto, entre las 23 y 1 h.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento