Michelin considera que el ERE temporal que ha planteado para 4.863 empleados de sus cuatro fábricas españolas "es una medida prudente y responsable" con la que pretende anticiparse a posibles situaciones de más difícil solución.

Así lo indicaron a Europa Press en fuentes de la empresa, que reafirmaron el compromiso adquirido por la compañía en el convenio colectivo de mantener todo el empleo temporal en los centros de trabajo.

Las mismas fuentes recordaron que Michelin España exporta tres cuartas partes de su producción. Aunque la empresa ya había descontado la debilidad del mercado español, "el comportamiento errático de la demanda externa" ha comenzado a pasar factura a las instalaciones españolas.

"Se ha llegado al límite, por lo que hemos planteado un ERE temporal entre mayo y septiembre", explicaron. Pese al impacto de la crisis económica, Michelin no había recurrido hasta el momento a la regulación de empleo ya que ha respondido a la situación con mecanismos de flexibilidad pactados con los sindicatos.

El expediente, de 36 días como máximo por trabajador, se aplicará de forma diferente en cada segmento de producto, en función de la evolución del mercado, si bien el objetivo es "no engordar los stocks".