Más de 500 israelíes han exigido este domingo en la ciudad de Tel Aviv el fin de las ofensivas militares lanzadas contra Líbano y la franja de Gaza.

Los participantes se concentraron en una calle céntrica de Tel Aviv para exigir al Gobierno del primer ministro, Ehud Olmert, que cese la campaña lanzada contra el Líbano y Gaza, tras el secuestro de tres soldados israelíes por milicianos de Hizbulá y Hamás.

En un artículo titulado "Verdaderos Objetivos", que difunde hoy la organización "Gush Shalom", uno de sus máximos dirigentes y analista político Uri Avineri, describe que el verdadero objetivo del Ejecutivo de Israel es el de "cambiar al régimen en Líbano e instalar un gobierno marioneta".

Y menciona que "ese era el objetivo que perseguía Ariel Sharón cuando invadió Líbano en 1982. Fracasó. Pero Sharón y sus alumnos en el liderato militar y político nunca han renunciado a esta idea".

El artículo explica que oficialmente, el Gobierno israelí exige al Gobierno de Líbano que desarme a Hezbolá y lo expulse de la zona fronteriza.

Aunque analiza que esta demanda "es claramente imposible bajo el actual régimen libanés, una fábrica delicada de comunidades etno-religiosas. El mínimo pasmo puede hacer caer toda la estructura del estado hasta llegar a una total anarquía".

También en la ciudad israelí de Haifa, donde han muerto ocho personas por el ataque de un cohete disparado por la milicia libanesa, decenas de mujeres judías y árabes se han concentrado para exigir a las autoridades que negocien un alto el fuego.