Anesvad ha valorado "positivamente" la sentencia de la Audiencia Provincial de Bizkaia que condena al ex presidente de la Fundación, José Luis Gamarra, a indemnizarla con 3.263.189 euros. La organización espera que la resolución judicial se cumpla "para poder destinar los fondos sustraídos al cumplimiento de su fin social".

El órgano jurisdiccional vizcaíno ha hecho pública la sentencia de caso Anesvad, por la que condena a Gamarra a seis años de prisión por un delito continuado de apropiación indebida de dinero de la Fundación. Además, deberá abonar una multa de 12 meses, "a razón de 50 euros cada cuota-multa", y tendrá que indemnizar a Anesvad con 3.263.189 euros.

El Tribunal también ha impuesto a los otros dos acusados, Francisco Martínez Fernández, y José Miguel Sustacha Olabe, exdirector financiero y exdirector general de la entidad, respectivamente, una pena de 21 meses de prisión y el abono de sendas multas de seis meses, "a razón de 12 euros cada cuota-multa" por un delito continuado de apropiación indebida "en concurso medial", con falsedad en documento mercantil.

En un comunicado, Anesvad ha acogido "con satisfacción el fin de este proceso judicial" en el que, "desde el principio, la organización ha estado personada como parte perjudicada, a fin de exigir la restitución de los fondos sustraídos y los daños ocasionados".

La Fundación espera, en estos momentos, a la sentencia se cumpla, con el fin de "poder destinar los fondos que se restituyan al cumplimiento de su fin social: la promoción y protección del derecho a la salud de las personas más vulnerables del planeta".

Anesvad ha asegurado que se trata de "un trabajo que la organización nunca ha dejado de desempeñar, y que desde 2008, se ha visto reforzado, con un incremento del 25 por ciento en los fondos destinados a proyectos de cooperación (de 9,3 millones de euros en 2008 a 11,6 millones de euros en 2011) y un aumento del número de personas atendidas".

La organización ha agradecido, además, "el apoyo y la fidelidad mostrada por las personas socias y colaboradoras durante este proceso", y ha lamentado "el daño que este caso ha ocasionado, tanto a su imagen y confianza, como a todo el sector de las ONG para el Desarrollo".