El director general de Comercio y Consumo del Gobierno de Canarias, Gustavo Matos, ha restado gravedad a la "virulencia" de la reacción de la patronal de grandes empresas de distribución ante el próximo incremento fiscal a este tipo de establecimientos anunciado por el Ejecutivo regional, y ha considerado que "amenazar o tratar de amedrentar con la pérdida de empleos ante un alza de impuestos sin tan siquiera conocer cómo afectará a su cuenta de resultados, no es un buen camino".

Matos, que tildó estas declaraciones de "injustas", ha defendido que ante la actual situación económica —con importantes recortes presupuestarios generalizados y ajustes obligatorios— no caben este tipo de manifestaciones acerca de los empleos y del encarecimiento de productos realizadas por la patronal.

"Se tratará de consensuar en la medida de lo posible y de negociar hasta donde pueda la aplicación de este impuesto, pero nos parece que éstos no son momentos en los que se deba estar amenazando con el empleo, dada la situación en la que estamos", dijo.

El director quiso también recordar que en Canarias se ha mostrado "mucha generosidad" con los grandes establecimientos comerciales en los últimos veinte años, en los que "se han realizado grandes inversiones públicas con el dinero de todos los canarios para acondicionar zonas de implantación para este tipo de comercios, a través de la creación de infraestructuras y equipamientos adecuados a las necesidades de tráfico y afluencia de personas".