El secretario general de UGT Extremadura, Francisco Capilla, ha considerado "imprescindible" combinar políticas de racionalización del gasto con actuaciones de reactivación de la demanda, ante la "sangría incesante" que "continúa" en el mercado laboral de la región, a tenor de los últimos datos de la EPA.

En caso de no aplicar dichas medidas "la economía extremeña peligra", según Capilla, que augura que la "sangría" del desempleo "continuará en los próximos meses gracias a las políticas que está llevando a cabo el Gobierno".

"La economía de la austeridad nos lleva al desastre", ha indicado el sindicalista, que lamenta que el Gobierno extremeño "sólo parece ser sensible al déficit, sacrificando en apenas nueve meses a 43.700 extremeños".

Así, propone centrar los objetivos políticos en la recuperación económica, del empleo y una "mayor" cohesión social, lo que permitirá a su juicio también "ajustar" las cuentas públicas. "No se puede crecer a partir de recortes. No se puede crecer desde el desequilibrio y la desigualdad. Hay que reactivar el consumo cuanto antes y retomar la inversión pública, mientras que la iniciativa privada siga desaparecida", ha aseverado, informa UGT en nota de prensa.

Asimismo, ante las cifras de la EPA, Capilla ha alertado sobre que "el paro crece en Extremadura el doble que en el conjunto del Estado". "Somos la tercera Comunidad donde más aumenta el desempleo. Lideramos la recesión", ha advertido, y ha subrayado que a su juicio la gestión en materia de empleo del Gobierno de Extremadura "es un fracaso absoluto ya que se basa en una desidia culpable, en un seguidismo perverso de la economía de la austeridad a toda costa, cueste lo que cueste". "Es necesario un factor detonante que invierta el estado de coma en que está la economía extremeña", añade.

Gobierno extremeño "superado"

Para el responsable regional de UGT, "el Gobierno extremeño está superado por la situación, no sabe por dónde le da el aire, no sabe qué hacer y lo que hace empeora el escenario. Su acción o inacción política se está convirtiendo en un freno para la recuperación".

Asimismo, ha advertido de que "el desastre económico está a la vuelta de la esquina". "El edificio económico de Extremadura se tambalea y amenaza con derrumbarse", ha apuntado, y ha añadido también que la reforma laboral es "la gasolina que ha incendiado el mercado laboral ayudado por el desmantelamiento del sector público (11.200 asalariados menos en los últimos 9 meses)".

"El consumo se retrae, las prestaciones de desempleo se acaban, los pequeños empresarios quiebran, cierra el pequeño comercio y la hostelería en el ámbito local, el tejido empresarial se desmantela y las pymes de todo tipo despiden a sus trabajadores", lamenta.

"Más impuestos, menos renta, significan más recesión", insiste, y resalta que el presidente extremeño, José Antonio Monago, "lidera la recesión en vez de apostar por la recuperación".

"Nuestro Gobierno potencia el paro y nos aboca a la miseria y a la emigración. Sólo ofrece resignación, ningún atisbo de esperanza a las decenas de miles de hogares extremeños que carecen de recursos. La cohesión social se resquebraja", advierte. RETROCESO

En esta línea, apunta que el presidente de la comunidad afirmaba —dice— el 10 de abril que Extremadura está experimentando "el cambio más profundo y transformador de su historia". "Los datos le dan la razón: estamos ante el retroceso más atroz y preocupante de nuestra historia reciente", añade.

Finalmente, apunta que "la realidad (ahí están los últimos datos económicos del Banco de España, las previsiones de los principales organismos internacionales, y las propias previsiones del Gobierno) no hace otra cosa sino mostrar el fracaso de las políticas de ajuste y de recorte de gastos, que relegan los objetivos de crecimiento económico, de creación de empleo y de cohesión social a muy lejanos planos".