El Día de Sant Jordi se enmarca este año en un panorama de reivindicación lingüística a favor de la lengua catalana. Así, aunque el día ha amanecido nublado, la actividad en las calles de Palma ha sido intensa desde primera hora de la mañana y algunos miembros de la clase política han aprovechado la ocasión para realizar sus compras, en las que no han faltado ejemplares de autores de las islas. Además, los lazos a favor del catalán han decorado el centro de la ciudad.

Entre los visitantes de los más de 50 puestos de libros que han salido este lunes a las calles de Palma, se han encontrado varios políticos de Baleares, como el alcalde de la capital, Mateo Isern, el conseller de Educación, Rafael Bosch, el teniente de alcalde de Cultura y Deportes, Fernando Gilet, la secretaria general del PSIB, Francina Armengol, el portavoz del PSM-IV-ExM, Biel Barceló junto a la diputada de la coalición, Fina Santiago, y la exalcaldesa socialista, Aina Calvo.

Los primeros en pasear por los stands del centro de Palma han sido Barceló y Santiago, ambos con varios ejemplares, rosas y lazos. "Es un día de fiesta y a la vez reivindicativo", ha precisado Barceló, además de confesar que celebra el Día de los Enamorados por Sant Jordi, en lugar del 14 de febrero.

Así, Barceló ha comprado 'Crim de sang', de Sebastià Alzamora y 'El metge d'Atenes', de Teresa Pous, y algún libro de literatura infantil y juvenil, como el ejemplar en castellano de 'Juego de tronos', del autor George R.R. Martin.

Barceló, que actualmente lee 'Els crepuscles més pàl·lids', de Miquel López Crespí, ha considerado que "hay que hacer un esfuerzo entre todos" en materia de cultura, sector también afectado por los recortes. En este sentido, ha recordado que "la cultura también es industria", ya que se trata de un motor económico que contribuye a la creación de puestos de trabajo.

Por su parte, Santiago ha optado por los ejemplares 'Un cel de plom', de Carme Martí, y 'Els casos més espatarrants de l'inspector Tellini Alpesto', de Pere Morey. Después de finalizar 'Memòries d'uns ulls pintats', la primera novela de Lluís Llach, que "sin duda" recomienda, actualmente tiene entre manos la lectura de Donna Leon, 'Testament mortal'.

Ambos miembros del PSM-IV-ExM se han mostrado fieles a la lectura en papel, "por el olor", ha comentado Santiago, quien además ha confesado que en ocasiones gira antes la hoja si la curiosidad no puede esperar.

Por su parte, el alcalde de Palma, Mateo Isern, ha asistido en primer lugar al parque Orson Welles situado en la barriada de Son Gotleu. Más tarde, en la Plaza Mayor, una docena de jóvenes con carteles y gritos reclamando 'A Mallorca en català!' han irrumpido su comparecencia junto al regidor de cultura, Fernando Gilet.

Isern ha considerado que "no hay que no hacer caso a según que tipo de manifestaciones", mientras el grupo les llamaba 'forasteros'. "Tienen derecho a expresarse y nosotros a hacer nuestra política", ha comentado, además de afirmar que también lee en catalán. Aprendió por su cuenta, ha explicado, a través de las 'rondalles' de Jordi d'es Recó que le dejaba su tía abuela.

Aunque todavía no había iniciado sus compras, Isern ha revelado que suele leer dos libros a la vez, "uno de lectura breve entre semana y otro largo para el fin de semana", y resalta su preferencia por la novela histórica". Así, ha comentado que actualmente lee 'Cela, mi padre' y 'Riña de gatos, Madrid 1936', premio Planeta 2010 de Eduardo Mendoza.

Por otra parte, un espontáneo ha aprovechado la presencia del alcalde con los medios de comunicación para reclamarle actuaciones en la calle Ferreries contra problemas sociales como la prostitución. Isern ha asegurado que tendrá en cuenta su propuesta y ha prometido una actuación "pronto".

Los socialistas muestran su apoyo al catalán

Por su parte, el grupo socialista se ha sumado a la campaña 'Per Sant Jordi, Enllaçats per la Llengua' y ha colgado lazos en defensa del catalán en las ventanas de su sede.

La secretaria general del PSIB-PSOE, Francina Armengol, ha remarcado que "la lengua tiene que ser un tema de estado y no se pueden romper los consensos que se han conseguido en democracia con la ley de normalización lingüística". Por ello, ha criticado al PP de romper un "consenso básico" en Baleares a favor del catalán. Uno de los puestos de libros ha regalado a Armengol una camiseta con un lazo dibujado y el slogan 'Que no et tallin la llengua'.

Armengol ha aprovechado el Día de Sant Jordi para comprar 'La Broma', de Milan Kundera y 'Ausencia del héroe', de Bukowski. Además, ha recomendado la obra 'Llefre de tu', de Biel Mesquida, un libro de actualidad que alterna con la segunda lectura de un ejemplar del autor Stephan Zweig, 'La impaciència del cor'.

La que fue compañera de la anterior legislatura, la exalcaldesa socialista, Aina Calvo, también ha confesado tener varios libros en la mesita de noche. Calvo ha afirmado que ahora tiene "más tiempo" para leer y sigue el argumento de 'Dime quién soy', de Julia Navarro. Además, ha revelado que comprará 'Naturaleza casi muerta', el último de la autora mallorquina Carme Riera y que tiene pendiente la lectura de 'Entra en mi vida', de Clara Sánchez.

índices de lectura

Respecto a los índices de lectura, el conseller de Educación, Rafael Bosch, ha destacado que "deben crecer" frente a la competencia de los medios audiovisuales. Por ello, considera un "reto" fomentar la lectura en cualquier soporte, aunque afirma que debe ser "compatible" la lectura tradicional con la audiovisual.

Por otra parte, Bosch no ha querido revelar los títulos de los ejemplares que ha adquirido este Sant Jordi porque lo considera "de mal gusto".

Sin embargo, ha comentado que tras la lectura del ensayo político 'El hombre que cambió su casa por un tulipán' está leyendo varias obras "simultáneamente". Así, ha mostrado su interés por la novela y ensayo sobre historia y filosofía de la ciencia, especialmente del primer cuarto del siglo XX, materia sobre la que trata uno de los ejemplares que ha adquirido y del que no ha querido nombrar el título.

A pesar de ello, Bosch recomienda dos obras que han presentado desde la Conselleria, de los autores Lluís Roura y Jaume Mallol. Además, ha sugerido un ejemplar que regalaría tanto a un político compañero como a un adversario, 'Breviari per a polítics' que le regaló el exconseller Francesc Fiol al finalizar su mandato.