El conselleiro de Economía e Industria, Javier Guerra, ha advertido este miércoles que la Xunta no está dispuesta a aceptar ninguna solución que "perjudique" a los miles de afectados gallegos por la emisión de participaciones preferentes, al tiempo que ha defendido el arbitraje como vía "más inmediata" de negociación y ha destacado que "ya van 260 peticiones" de este tipo a Novagalicia Banco.

Interpelado por el socialista Juan Carlos Francisco Rivera, ha proclamado que el "objetivo" de la Xunta es lograr "la disponibilidad total del dinero" por parte de los afectados y que se pueda "hacer líquida su inversión". "En eso estamos depositando los esfuerzos dentro de nuestra competencia", ha garantizado, si bien ha advertido de que "la llave de esta caja está en Bruselas".

Tras repasar las gestiones de los distintos dirigentes de la Xunta ante el Banco de España, la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) y la Comisión Europea (CE), el conselleiro ha recordado que Novagalicia es "propiedad del FROB" y que, a diferencia de lo ocurrido en otras comunidades, la aspiración del Ejecutivo autonómico es que la entidad "no sea subastada" por lo que no se pueden aplicar las mismas soluciones.

Así, ha subrayado que el hecho de que Novagalicia "tenga el 50 por ciento de la cuota de mercado y dinero público" limita la solución, puesto que Bruselas no está dispuesta a aceptar una vía que no suponga "la valoración real" de las preferentes en el mercado, paso que se traduciría, ha advertido, en "una pérdida evidente de valor" y que al Gobierno gallego "no le vale".

Investigación del igc

"No me lo creía y fui a comprobarlo al Banco de España, que me dice que ahí está el problema", ha remarcado el conselleiro, quien ha insistido en que la solución "definitiva" al problema "no está en Vigo, ni en Santiago ni en Madrid, sino en Bruselas". Por ello, ha defendido que la "única capacidad" con la que cuenta la Xunta, en el marco de sus competencias, es con el arbitraje.

"No nos parece la solución perfecta, que sería poner el dinero en la cuenta de los afectados, pero es la más inmediata. Por eso ya van 260 peticiones de arbitraje a Novagalicia Banco. Serán individualizadas y gratuitas", ha defendido, para añadir que los afectados podrían ir por la vía judicial, pero que esta acción "llevaría muchísimo tiempo".

Frente a las dudas de la oposición, ha señalado que el Gobierno gallego busca "una sentencia que sirva ante Bruselas de la forma más rápida posible" y que "no perjudique a los consumidores" con el sistema de arbitraje. "Todas las demás vías pueden seguir abiertas pero llevan tiempo y no garantizan el dinero de inmediato, que es lo que necesitan los afectados", ha señalado.

Dicho esto, ha negado que la Xunta "no haga nada" y ha asegurado que a él "no le hace falta" que los afectados vayan a protestar al Parlamento, como pasó en la anterior sesión plenaria, para "conocerlos". "A lo mejor al BNG sí", ha contrapuesto, antes de insistir en que la Xunta "siempre estará de su parte" y trabajará para que recuperen su dinero "a la mayor velocidad".

A modo de ejemplo, ha reiterado que se ha dado información, que se ha reforzado el apoyo a los consumidores en los ayuntamientos y que se dará curso a las reclamaciones "de una en una". Además, ha indicado que la Xunta insistirá en la búsqueda de responsabilidades para defender a los ciudadanos "engañados" y ha avanzado que el Instituto Galego de Consumo (IGC) "tiene en trámite" una investigación sobre el proceso de comercialización de las preferentes.

Solución "política"

Frente a los argumentos de Guerra, el diputado socialista Juan Carlos Francisco Rivera ha censurado la "demagogia" del conselleiro y ha insistido en que el problema generado "sólo se puede resolver en el ámbito político". "La salida de las participaciones tiene que ser política", ha defendido, antes de instar a la Xunta a dejarse "de propaganda" y plantear la solución "ante el Banco de España, la CNMV y Bruselas".

En su intervención, ha insistido en que el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, debe hacer "algo más que propaganda" y ha alegado que el Gobierno gallego tiene "responsabilidad" en la búsqueda de soluciones. "Déjense de hacer titulares y adopten decisiones para la defensa efectiva de miles de gallegos que no pueden disponer de sus ahorros por el bloqueo de sus participaciones y acciones", ha retado.

En la misma línea, el nacionalista Carlos Aymerich ha recordado el origen de la emisión de preferentes "en las islas Caimán" vinculadas con "empresas fantasma" y como, posteriormente, durante las épocas de gestión del popular José María Aznar y del socialista José Luis Rodríguez Zapatero, se diseñó un modelo para "entrar directamente a saco y con fraude en los depósitos bancarios" de los clientes.

"Ya no eran las grandes fortunas las que iban a comprar preferentes, sino los ciudadanos a los que conoció el otro día", ha espetado Aymerich, quien ha lamentado que ahora "no se quiera solucionar el problema" y Xunta y Gobierno central se limiten a informar de las vías de reclamación. "Déjese de milongas, que para eso ya está Feijóo", ha pedido el nacionalista quien ha tildado al presidente de "vendedor de crecepelos" y ha ejemplificado con las gestiones con Pemex en México.

En el polo opuesto, el popular Alberto Sueiro ha coincidido con el conselleiro en que el arbitraje como solución individual "es una gran salida" y, sobre todo, "la salida que está en manos de la administración gallega". A renglón seguido, ha criticado la postura de socialistas y nacionalistas, a los que ha pedido que "no jueguen con un tema que es muy serio".