El Pleno de las Cortes de Castilla y León ha rechazado este miércoles con la mayoría absoluta del Grupo Popular instar a la Junta a interponer un recurso de inconstitucionalidad contra la Reforma Laboral aprobada por el Gobierno de la nación, como han pedido en sendas iniciativas los grupos de la oposición que han cargado contra los efectos de una reforma que ha multiplicado por cuatro los trabajadores afectados por un ERE en la Comunidad en los últimos meses hasta los 4.500 en febrero, según datos de la viceportavoz socialista, Ana Redondo.

Este ha sido uno de los principales argumentos utilizados por Redondo para justificar la necesidad de presentar un recurso de inconstitucionalidad contra una reforma laboral que, según ha advertido, perjudicará también a las pequeñas y medianas empresas ante la caída del consumo por parte de los ciudadanos por el "miedo" al despido o a no encontrar un empleo y que incentivará el cierre de las factorías de las multinacionales europeas "que en este momento de recesión están llevando a cabo un proceso de reestructuración por exceso de producción planteando cerrar factorías".

Ana Redondo ha puesto como ejemplo el caso concreto de Unilever, que dos semanas después de la aprobación de la reforma laboral decidió "desmantelar" la factoría española "y no la francesa ni la alemana" ya que "nos hemos igualado en costes pero no tenemos la matriz ni la capacidad de negociación de Merkel o Sarkozy". En este sentido, se ha preguntado qué ocurrirá con factorías como las de Renault en Castilla y León de las que dependen 30.000 empleos. "¿Nos podemos jugar esto?", se ha preguntado la socialista, que ha apostado por "mantener lo nuestro" con la presentación de un recurso de inconstitucionalidad que impida poner las cosas fáciles a unas empresas que "no son hermanitas de la caridad".

Desde las filas populares, el procurador Raúl de la Hoz ha rechazado la presentación de un recurso de inconstitucionalidad contra la reforma laboral que debería ser persentado, a su juicio, por el PSOE ya que cuenta con "mayoría suficiente" para hacerlo en el Congreso, en el Senado o en los gobiernos vasco y andaluz, a diferencia de IU, ha admitido en otro turno de palabra, a la que no le queda otro remedio que pedirlo a través de las Cortes regionales.

De la Hoz ha cargado contra la actitud de los socialistas, a los que ha acusado de no importarles una posible inconstitucionalidad de la reforma laboral sino de pretender ser ahora los "coristas" de los sindicatos en la convocatoria de sus movilizaciones, como la huelga general del pasado 29 de marzo o las del día del trabajo del 1º de mayo.

"Tiene mérito", ha ironizado De la Hoz, para quien tiene que ser "duro" pasar en un mes "de legislar contra los trabajadores a llevar las pancartas" de los sindicatos. En este sentido, se ha preguntado cómo los representantes de los trabajadores aceptan compartir pancarta "con los que han destruido 5,3 millones de trabajos en este país", un hecho al que se ha referido como "la mayor vulneración del derecho constitucional al trabajo", un "gravísimo daño que nosotros tenemos que reparar".

Críticas de filibusterismo parlamentario

Redondo y De la Hoz se han enzarzado también sobre el procedimiento de la presentación de la proposición no de ley del Grupo Socialista que el principal partido de la oposición pretendió llevar al último pleno del pasado mes de marzo cuando fue calificada como "apta para su debate" por los servicios jurídicos pero fue rechazada por la mayoría absoluta del PP en un ejercicio de "filibusterismo parlamentario" censurando a la oposición y coartando el debate, lo que sitúa a Castilla y León, según la viceportavoz socialista, más cerca de los parlamentos bananeros que de democracias sólidas y consolidadas.

Sin embargo, Raúl de la Hoz ha dudado de la "extraordinaria urgencia" de la PNL del Grupo Socialista que podría haber ido, a su juicio, al anterior pleno y no a este, a cinco días de la celebración del 1 de mayo. "¿Eso es coherencia?", se ha preguntado.

En su debate, Redondo ha visto "enfadado" a De la Hoz por no haber hecho bien su trabajo y no haber leído con rigor el texto final del Manifiesto de Villalar que se consensuó entre las partes, una vez que ha trascendido que lo que se leyó en la campa no se correspondió fielmente a lo pactado, a lo que el procurador 'popular' ha respondido en una posterior intervención en el Pleno para recordar que cuando hay un error y se pide perdón, como ha ocurrido, lo acepta por "elegancia y nobleza política".

Desde el Grupo Mixto, que ha defendido una propuesta de acuerdo de interposición de recurso de inconstitucionalidad contra la totalidad de la Reforma Laboral, su portavoz, José María González, de IU, ha cifrado en 60.000 los despidos previstos con la aplicación de esa reforma que dejará en manos del "gran capital" 1.580 millones de euros de la masa salarial.

González, que ha recordado que su grupo también quiso en su día que se debatiese sobre este asunto en las Cortes, ha defendido la conveniencia de llevarlo hoy al Pleno ante la cercanía en el tiempo del 1º de mayo, "el día de los trabajadores", y tras la petición sindical ayer al Defensor del Pueblo en el mismo sentido de inconstitucionalidad de la norma que "ataca visceralmente", a su juicio, a la Constitución Española en su primer artículo que habla de España como un Estado social y de derecho.

El procurador por IU ha advertido asimismo de que la reforma laboral es un ataque al Estatuto de Autonomía de Castilla y León, que reconoce la capacidad para legislar sobre el empleo estable, sobre la calidad del empleo, sobre las políticas activas de empleo y sobre el diálogo social, "que también es atacado" ya que los empresarios "difícilmente van a negociar nada que no tenga que ver con la propia Junta porque son dueños, amos y señores de la situación".

Sin embargo, Raúl de la Hoz ha acusado a González de confundir negociación colectiva y diálogo social y ha advertido de que la Constitución Española no es de ningún partido sino de los ciudadanos por lo que ha visto "peligroso e inmaduro" tratar de apropiarse de la Carta Magna para consagrar un modelo de relaciones laborales que sólo resulte compatible con políticas de izquierdas.

De la Hoz ha defendido el objetivo de una reforma laboral "valiente" que desarrolla, según ha recordado, muchos preceptos de la anterior e "insuficiente" reforma socialista a la que el PP no se opuso. Dicho esto, ha pedido "tiempo" a la ciudadanía para comprobar los efectos de la reforma laboral del PP para lo que se necesita, también, según sus palabras, que España pueda recuperarse económicamente y se genere empleo.

El debate parlamentario ha sido seguido desde la Tribuna de Invitados de las Cortes por los secretarios regionales de CC.OO y UGT, Ángel Hernández y Agustín Prieto, respectivamente, así como por otros representantes sindicales.