En la sentencia, a la que ha tenido acceso Europa Press, el juez pone de manifiesto que los acusados, como propietarios de una empresa ganadera, tenían en abril de 2006 una parcela de 9.00 metros cuadrados en el paraje conocido como 'Cortiguinilla', en la carretera Sevilla-Utrera.
En la misma, ambos ampliaron en 60 metros cuadrados una vivienda ya existente y construyeron diez boxes para caballos de 222,84 metros cuadrados, así como el cerramiento de la parcela con placas de hormigón y perfiles metálicos en una longitud de 80 metros y una altura de 2,5 metros.
Según recoge el fallo, la parcela está situada en suelo clasificado como no urbanizable por el PGOU de Alcalá de Guadaíra, a lo que se suma que la parcela deriva de una subparcelación ilegal. Asimismo, los boxes construidos no se encuentran separados a más de 500 metros de otras edificaciones.
Asimismo, dice la sentencia que la edificación no es autorizable o legalizable conforme al planeamiento municipal por no estar permitida en esa clase de suelo "construcción de ninguna clase", habiéndose valorado pericialmente el coste de reposición de la finca a su estado original en 112.243,80 euros.
Por ello, el juez condena a cada acusado a seis meses de cárcel y al pago de una multa de 1.440 euros por un delito contra la ordenación del territorio, ordenando además la demolición de lo construido ilegalmente. Asimismo, los inhabilita durante dos años para el ejercicio de la profesión de construcción.
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