La Asociación de Editores de Andalucía ha reivindicado este lunes, Día Internacional del Libro, "un mayor apoyo institucional para el sector del libro", sobre todo "en lo referente a la promoción", al tiempo que se ha mostrado "de acuerdo" con gran parte de las medidas que en pro del fomento de la lectura "se están llevando a cabo en Andalucía".

En declaraciones a Europa Press, su presidente, Álvaro Luengo, ha señalado que las industrias culturales "necesitan siempre un respaldo oficial", porque "son empresas que no tienen una base industrial detrás, con valores que no están muy bien definidos por parte de las administraciones ni de la propia sociedad, como, por ejemplo, en todo lo relacionado con derechos de autor, temas que mucha veces el público ve muy etéreos", por lo que "es difícil convencer de que eso supone desembolsos, que supone un riesgo, y que necesita un apoyo".

Asimismo, y respecto a las medidas que desde la Administración andaluza se llevan a cabo para fomentar el hábito de la lectura, Luengo ha manifestado que la Asociación de Editores "apoya y está de acuerdo" con la gran mayoría de las mismas, puesto que "las que se están aplicando ahora son buenas y funcionan", ya que "apuestan por promocionar el interés de los niños y jóvenes por la lectura y por escribir", una hábito que "mantendrán durante toda su vida".

"Hemos avanzado mucho, y si lo comparamos con otras ciudades de España, en Andalucía se lee bastante", resalta Luengo. En este sentido, y según los datos del último estudio de Hábitos de Lectura en Andalucía, el 100 por cien de los niños entre 10 y 13 años admite que lee al menos una vez por trimestre y que —en un 93%— en su centro escolar se realizan actividades en torno a la lectura. Además, y según el mencionado estudio, el 55% de andaluces lee habitualmente libros, y hasta más del 85% lee revistas o en Internet.

Competencia de los medios visuales

Además, para casi todas las administraciones el fomento de la lectura "es una meta común", asegura el presidente de la Asociación de Editores, quien resalta la "colaboración" de la AEA con muchas de estas actividades, ya que "para nosotros es un negocio de futuro y apostamos por crear unas bases", aunque, hoy por hoy, "hay una competencia muy fuerte con los medios visuales, y, en el caso de Andalucía, hasta con el clima, ya que mucha gente prefiere ir a la playa que leer", pese a que la playa "es el mejor sitio leer", subraya.

Igualmente, y en relación a cómo la crisis está afectando al sector editorial, Luengo ha apuntado que "muchísimo" porque el tema de la cultura "es un tema secundario y prescindible", y la gente "es lo primero que deja", lamenta. En cualquier caso, prosigue, "siempre se ha hablado de que el sector del libro está constantemente en crisis, porque es un sector frágil, que depende de apoyos, como las políticas de apoyo a la lectura". "Y no solo afecta a los editores, sino a los libreros, distribuidores, impresores o aquellos que diseñan las imágenes", agrega.

No obstante, "nos estamos defendiendo algo con el tema de la exportación", destaca, aunque aquí "también tenemos problemas". Al respecto, explica que Argentina, "muy presente ahora en los medios por el tema de la expropiación de YPF a Repsol", afirma, "lleva ya seis o siete meses con las fronteras cerradas, y contenedores llenos de ejemplares retenidos en la frontera sin poder entra en el país, por, parece ser, un problema de defensa interior". "Está claro que el petróleo es más importante que los libros y por ello no sale tanto en la prensa, pero, indiscutiblemente, nos afecta", concluye Luengo.