UGT Castilla-La Mancha ha reclamado —después de conocer el dato del IPC del mes de marzo— la actualización de salarios y la aplicación de políticas de estímulo económico para salir de la crisis, al tiempo que alerta de que las revisiones de precios del transporte público "penalizan" a trabajadores activos y parados,

Para el sindicato, la evolución de la inflación en la región viene acreditada por el "desplome" del consumo y es la "antesala" de la destrucción de empleo, ha informado en nota de prensa.

El secretario de Acción Sindical de UGT en Castilla-La Mancha, Pedro de la Cruz, recuerda que la inflación en marzo de 2011 era del 3,6 por ciento, frente al 1,9 por ciento de marzo de 2012, "lo que demuestra un descenso continuado, que responde a la atonía originada por la caída de la demanda interna, el incremento del desempleo y la aplicación de políticas de recorte del gasto público por parte de las administraciones públicas", añade.

"En la situación actual, la revisión de los precios de los transportes públicos penaliza a los trabajadores en activo y a los parados, al tiempo que las familias ven afectado su poder de compra, tanto por la congelación salarial como por no tener empleo, por lo que el consumo se reduce a lo estrictamente necesario", ha argumentado.

Todo ello, según De la Cruz, unido a la pérdida de poder adquisitivo por el aumento de los precios y a la incertidumbre y al desánimo de la población en general, "produce efectos negativos sobre el consumo y nos aleja de una posible recuperación económica".

Respecto al comportamiento de la tasa interanual de IPC por provincias, el responsable de UGT destaca el comportamiento de la de Toledo, con un incremento del dos por ciento, seguida de Ciudad Real y Guadalajara cuya tasa se sitúa en el 1,9 por ciento, mientras que en Albacete es del 1,7 por ciento y en Cuenca del 1,6 por ciento.

Por último, el secretario de Acción Sindical de UGT apuesta por el "diálogo social y político para conseguir la reactivación económica y la creación de empleo, para superar esta situación".

Además, insiste en la importancia de "un reparto justo y equilibrado de los esfuerzos para salir de la crisis, acompañado de políticas públicas responsables, y no de amnistías fiscales, ajustes de gasto indiscriminados y reformas impuestas".