Unos 4.000 trabajadores de Navantia protestan ante el Ayuntamiento de Ferrol, al que se les niega la entrada

Unos 4.000 trabajadores de Navantia Ferrol y Fene y de empresas auxiliares del sector naval de la comarca han realizado una asamblea en la plaza de Armas, frente al Ayuntamiento de Ferrol, al que se les ha prohibido la entrada cuando tenían previsto realizar un encierro para reclamar soluciones a la falta de carga de trabajo que ha provocado el despido de 900 operarios de compañías subcontratadas en los últimos meses.

Unos 4.000 trabajadores de Navantia Ferrol y Fene y de empresas auxiliares del sector naval de la comarca han realizado una asamblea en la plaza de Armas, frente al Ayuntamiento de Ferrol, al que se les ha prohibido la entrada cuando tenían previsto realizar un encierro para reclamar soluciones a la falta de carga de trabajo que ha provocado el despido de 900 operarios de compañías subcontratadas en los últimos meses.

La asamblea de trabajadores se ha realizado por primera vez fuera de los muros del astillero con el objetivo de informar a los ciudadanos de "lo que fue, es y será" el sector naval en la comarca, que representa el 40 por ciento de la industria de la comarca, con 17.000 empleos directos e indirectos, pero que se encuentra con "un futuro incierto y negro a corto y medio plazo".

Ignacio Naveiras, portavoz del Comité de Empresa de Navantia Ferrol, ha recordado que en los últimos meses la "sangría de despidos" se cifra ya en "más de 900" despidos, que agravan los casi 21.000 desempleados de la comarca.

Ha criticado que la diputada parlamentaria Natalia Barros hablase este miércoles de que Navantia es una empresa "en quiebra", porque "no hay nada más lejos de la realidad" y ha pedido a las administraciones públicas que "se quiten la careta" sobre la construcción reclamada del dique flotante para reparación de grandes buques.

Los Comités de Empresa tienen prevista una reunión a las 18.00 horas con los representantes de los ayuntamientos que conforman la Mancomunidad de municipios de Ferrolterra. Los trabajadores habían planteado mantener un encierro simbólico en el interior de la casa consistorial ferrolana hasta que se celebrase la reunión, pero la Policía Local cerró las puertas y les impidió el acceso.

Una actitud de "alarde de mano izquierda" del "Partido Popular que gobierna en el ayuntamiento, la Xunta y el Gobierno", según ha indicado Naveiras, que ha provocado las críticas de los trabajadores y que ha sido calificada como "un signo claro de la disposición de atender las reclamaciones de los trabajadores y los ciudadanos".

"Es hora de dejarse de rifi-rafes y agruparse y buscar la unidad", ha añadido el portavoz del Comité de Empresa, que ha asegurado que se les pedirá a los alcaldes que acompañen a los trabajadores a Madrid para trasladar al Gobierno central las exigencias del sector.

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