"El PSOE está empeñado en no permitir dar solución a los 5,3 millones de parados que dejaron en el país por su nefasta gestión económica", ha informado el PP en una nota de prensa. Tanto el PSOE nacional como el PSR-PSOE "están empeñados en torpedear cualquier actuación y medida impulsada por el Gobierno del Partido Popular para salir de la crisis económica, como es la Reforma Laboral recientemente aprobada por el Gobierno de España y que se tramita en el Congreso de los Diputados".

La Reforma Laboral del PP, han asegurado los 'populares' "es necesaria para terminar con el paro que provocó el PSOE, con la dramática situación a la que abocó a millones de españoles". Esta Reforma busca el empleo estable y de calidad, la formación de los trabajadores como derecho y el apoyo a los autónomos y las PYMES, que representan más del 95 por ciento de nuestro tejido productivo.

Ajustar realidad económica

Es una reforma que facilita la contratación y aumenta la flexibilidad interna para que, ante las dificultades, las empresas y trabajadores "se puedan ajustar a la realidad económica del momento y el despido sea el último recurso". Es una reforma que "dará mayores oportunidades a los jóvenes, a las mujeres y a los parados de larga duración, que ayudará a frenar la destrucción de empleo y que sienta las bases para que nuestro país recupere la senda de la creación de empleo".

Por lo tanto, mientras el PP trabaja para dar solución a los 5,3 millones de españoles que "quieren trabajar y no pueden, el PSOE trabaja para que esta solución no llegue nunca".

"Las incongruencias del PSOE respecto a las últimas reformas laborales son manifiestas", han apuntado desde el PP. Así, el Grupo Socialista en el Congreso "no presentó una enmienda a la totalidad a la Reforma Laboral de Zapatero que fue impuesta, que también provocó una huelga general y que, encima, sólo agravó el problema del paro. Ni el PSOE nacional se opuso a esa Reforma ni el PSR-PSOE se opuso, a pesar de las demandas de los sindicatos, empresarios y grupos políticos. Es más, el Gobierno socialista llegó decir que era intocable".

A diferencia del PSOE, el Gobierno del PP "sí está dispuesto a recoger sugerencias de los grupos parlamentarios en el Congreso que mejoren la Reforma Laboral y siempre ha estado abierto al diálogo con sindicatos y empresarios, como se ha demostrado con las reuniones mantenidas con Mariano Rajoy con la Ministra de Empleo".

De igual forma, la "irresponsabilidad y falta de coherencia del PSOE ante la convocatoria de huelgas generales es bochornosa". Así, el PSOE rechazó la huelga general de 2010, cuando estaba en el Gobierno, y ahora ha apoyado la huelga con un Gobierno del Partido Popular. Sin embargo, el Partido Popular "ha rechazado siempre las huelgas generales por coherencia y sentido común, con independencia de quién gobierne en cada momento".