El conseller de Justicia y Bienestar Social, Jorge Cabré, considera que no querer asumir ciertas competencias por parte de las comunidades autónomas "es tanto como no querer el estado autonómico". "No me parece razonable que cuando las cosas van mal, decir que esto no lo quiero", porque "si quieres algo, no dejas de quererlo porque va mal". Al contrario, "lo quieres más y peleas para que vaya bien".

Cabré, que se ha pronunciado de esta manera a preguntas de los medios en relación a la propuesta de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, quien abogó este martes por devolver al Estado las competencias de Justicia, Sanidad y Educación, "si España lo necesita".

En este sentido, el titular de Justicia de la Comunitat Valenciana ha remarcado que su criterio a ese respecto "siempre ha sido contrario". "No hay que devolver competencias de justicia" y "no es el planteamiento adecuado en estos momentos porque no se trata de devolver o no devolver —competencias al Estado—, ya que el servicio tiene que seguir funcionando, lo hagamos unos o lo hagan otros", ha apuntado.

Además, ha argumentado que las autonomías "podrán funcionar mejor o peor" y habrán actuado "mejor o peor, igual que el Estado puede haber funcionado mejor o peor". Pero, "la realidad es que la cercanía hace mucho" y la mejor forma de que funcione una administración es la "cercanía con el ciudadano", ha remarcado.

"Conozco los juzgados, mi teléfono está abierto a cualquier juzgado, a cualquier fiscal u operador jurídico. Esa cercanía es muy importante y nadie me tiene que contar los problemas de la justicia en la Comunitat", ha añadido.

Por este motivo, Cabré considera que "desde el Palacio de San Bernardo en Madrid —sede del Ministerio de Justicia— seguramente sería mucho más difícil saber la realidad de la justicia valenciana, como la de otros sitios".

El conseller ha asegurado que la "cercanía" de la administración "es lo que siempre se ha argumentado para la creación del estado autonómico y, por lo tanto, no tiene sentido replantearlo y acabarlo". "Eso no quiere decir que no haya que trabajar mejor" porque "si las cosas están como están" es "culpa de todos" y las administraciones "tendremos que reconocer que si hemos llegado o no hemos llegado es porque todos no hemos actuado, a lo mejor, como había que actuar". Por ello, apuesta, desde ese planteamiento, "mirar hacia delante".