La plataforma Defensa de la Bahía (DEBA, opuesta al emplazamiento del Centro Botín de las Artes en el muelle de Albareda de Santander) ha advertido por carta a los distintos responsables de la tramitación de este proyecto de que podrían acabar en los tribunales, ellos, a título personal y no de las Administraciones a las que representan.

Los responsables políticos de instituciones como el Ayuntamiento de Santander, el Gobierno de Cantabria y la CROTU (Comisión Regional de Ordenación del Territorio y Urbanismo) o la Autoridad Portuaria están recibiendo una serie de cartas, enviadas por DEBA, en la que les informan de este extremo.

En ella, se les especifica que "todo aquel que firme" la aprobación de la modificación número 9 del Sistema General Portuario (la que permite la instalación del Centro Botín) podría incurrir en un delito de prevaricación urbanística.

En concreto, se podrían estar vulnerando la Ley del Suelo, la Ley de Puertos (en lo relacionado con los usos en las zonas de dominio público) y la Ley de Costas.

A esto se suma que la plataforma no descarta recurrir la licencia de construcción, cuando se conceda, con lo que el Centro Botín podría "engrosar" el "capítulo triste" de edificaciones con sentencia de derribo en la región, según ha remarcado el representante de Arca, la asociación ecologista que ha promovido la mayoría de los procesos judiciales que desembocaron en esos fallos judiciales.

"doble velocidad" de la administración

José Antonio Bonilla, integrante de la plataforma, ha criticado el "menosprecio" de la CROTU a las opiniones de ciudadanos individuales y colectivos profesionales al rechazar las alrededor de 1.600 alegaciones presentadas contra la modificación número 9 del Sistema General Portuario, la que dio cobertura al cambio de uso en el muelle de Albareda para permitir la instalación de esta dotación cultural.

Lo que ha sucedido con el Centro Botín es, para Carlos García, de ARCA, una "carrera alocada para una decisión tomada de antemano", en lo que Bonilla califica de "política de hechos consumados".

Con ella, añade, se prueba que existe una "doble velocidad" a la que funciona la Administración "cuando quiere", pero, en este caso, supeditando los intereses generales a los "económicos" de una fundación privada.

"Todo se debe al capricho ególatra de Botín", ha aseverado el representante de Arca, para quien "abandonar" así los intereses generales por el de un particular "no es democracia".

Y Juan García, del Movimiento en Defensa de la Identidad de la Bahía (integrado en la plataforma DEBA), ha criticado el "empecinamiento" en ocupar un "muelle emblemático" y "de representación" de la ciudad.

"por la puerta de atrás"

Pero además, sus críticas se extienden al desarrollo del conjunto del Frente Marítimo, como plasman en un folleto informativo en el que repasan, sobre el plano de la ciudad, distintos proyectos que afectan a la Bahía: desde el Centro Botín hasta la ampliación del Puerto en Raos, pasando por la ampliación del CEAR de Vela con sus actuaciones en San Martín y el proyecto en Varadero (en el Barrio Pesquero).

Porque, a juicio de esta plataforma, lo que se está haciendo es una modificación "integral" de todo este entorno, pero "trozo a trozo" (la tramitación del Centro Botín se ha hecho con la modificación número 9 del Sistema General Portuario, y la del CEAR con la modificación número 10), y "por la puerta de atrás".

Así, con un "procedimiento un tanto tramposo", según ha apuntado Carlos García, de Arca, "se está jugando con el futuro de esta parte de la ciudad".

La plataforma Deba, formada por ARCA, Cantabria Nuestra, Ecologistas en Acción, Movimiento en Defensa de la Identidad de la Bahía, Tajamar, Democracia Real Ya Santander y Estado de Malestar Cantabria, está preparando un recorrido en lancha por la bahía, a cargo de expertos, para explicar 'in situ' los cambios que afectarán al frente marítimo.

Los interesados en acudir pueden consultar e inscribirse en el blog de Deba: http://pdeba.blogspot.com